SANIDAD» FARNÓS DICE QUE EL CENTRO DE LA RIBERA SERÁ "EL NÚMERO UNO" El personal elegido para el Hospital de Alzira ocupa puestos "preeminentes" en centros públicos

El nuevo hospital de Alzira, "símbolo del cambio de la gestión sanitaria", entrará en funcionamiento el 1 de enero de 1999, si los cálculos del consejero Joaquín Farnós, que ayer se mostró "impresionado" con la marcha de las obras, no fallan. Mientras se empieza a dotar de equipamiento al "hospital número uno de España", en palabras de Farnós, se va concretando el perfil de sus futuros trabajadores, el 80% de los cuales ocupa en estos momentos "puestos preeminentes" en los hospitales públicos valencianos. La propia consejería va a facilitar el traspaso de profesionales de La Fe (el hospital de...

El nuevo hospital de Alzira, "símbolo del cambio de la gestión sanitaria", entrará en funcionamiento el 1 de enero de 1999, si los cálculos del consejero Joaquín Farnós, que ayer se mostró "impresionado" con la marcha de las obras, no fallan. Mientras se empieza a dotar de equipamiento al "hospital número uno de España", en palabras de Farnós, se va concretando el perfil de sus futuros trabajadores, el 80% de los cuales ocupa en estos momentos "puestos preeminentes" en los hospitales públicos valencianos. La propia consejería va a facilitar el traspaso de profesionales de La Fe (el hospital de referencia de la Comunidad Valenciana) al futuro centro sanitario de gestión privada.

El director médico del área 10, Antonio Burgueño, avanzó ayer que ya se han mantenido reuniones con médicos de La Fe que quieren trabajar en el Hospital de Alzira, a los que la consejería "facilitará su acceso para acá". Burgueño aseguró que el 80% de los profesionales ya han sido elegidos: "Se trata de personas con enorme experiencia, que ocupan puestos preeminentes en hospitales públicos valencianos y quieren venir a este hospital", dijo. Además de este importante capital humano (entre las 3.200 solicitudes recibidas hay 60 de otros países), el hospital contará con los equipos de diagnóstico más avanzados, tecnología punta para el tratamiento del cáncer y habitaciones individuales, "imprescindibles" para preservar la intimidad de los enfermos, según Burgueño, quien destacó el "atractivo" del centro. Pedro Razkin, presidente de Adeslas (la empresa de seguros privada que gestionará el hospital) aseguró que el centro de La Ribera servirá de referente para otros puntos del país, y subrayó las ventajas de aplicar la "calidad de la gestión privada a la garantía de la financiación pública". "Público, totalmente público y gratuito", agregó el consejero Farnós, quien aseguró que la única diferencia con otros centros radica en la gestión empresarial. De hecho, Farnós se mostró convencido de que "Alzira no será una ruina", ya que las 34.000 pesetas de coste por paciente y año son un 20% menos de lo que cuesta la atención en los hospitales de la consejería. Añadió que Alzira será "un estímulo" para la sanidad pública, que necesita mejorar y lanzó un mensaje a la oposición: "Sus críticas no tenían fundamento".