El Defensor del Menor investiga los cursos de enseñanza musical del Ayuntamiento de Madrid

Las seis escuelas de música propiedad del Ayuntamiento de Madrid tendrán que pasar el examen del defensor del menor de la Comunidad, Javier Urra. Esta institución ha remitido una comunicación al concejal de Cultura de la Casa de la Villa, Juan Antonio Gómez Angulo, del PP, pidiéndole explicaciones sobre los criterios con los que se conceden las plazas en estos centros de enseñanza musical. Urra explica su interés por el proceso administrativo que sigue el Ayuntamiento. "Quiero cerciorarme de que ese proceso se está realizando con transparencia. Hay niños que, año tras año, piden en vano una pl...

Las seis escuelas de música propiedad del Ayuntamiento de Madrid tendrán que pasar el examen del defensor del menor de la Comunidad, Javier Urra. Esta institución ha remitido una comunicación al concejal de Cultura de la Casa de la Villa, Juan Antonio Gómez Angulo, del PP, pidiéndole explicaciones sobre los criterios con los que se conceden las plazas en estos centros de enseñanza musical. Urra explica su interés por el proceso administrativo que sigue el Ayuntamiento. "Quiero cerciorarme de que ese proceso se está realizando con transparencia. Hay niños que, año tras año, piden en vano una plaza y que podrían encontrarse en una situación de indefensión", explicó Urra.

El defensor del menor, que este fin de semana se encontraba en Copenhague (Dinamarca) con motivo del II Encuentro Europeo del Menor, ha recibido un buen número de quejas sobre lo extraordinariamente difícil que resulta la admisión en alguna de las seis escuelas municipales de música diseminadas por la capital. Entre los seis centros, el Ayuntamiento suma algo más de 2.000 plazas para ofrecer a los interesados. Pero la demanda actual de esta enseñanza artística duplica con creces esa cifra. Y más de un niño le ha planteado a Javier Urra su desazón ante esta circunstancia y su frustración ante las negativas constantes que recibe del Ayuntamiento de Madrid."En concreto", explica el defensor del menor, "una niña nos llamó para contarnos que llevaba varios años solicitando plaza sin éxito, y que la única explicación era que se encontraba en lista de espera".

Ante este panorama, Javier Urra entiende que en estos centros municipales "no se aclara qué lugar en la lista de espera ocupa cada candidato", lo que se traduce en "una posible falta de transparencia e indefensión".

El defensor del menor, que depende orgánicamente de la Asamblea de Madrid, ha concedido al concejal del área municipal de Cultura, Juan Antonio Gómez Angulo, un plazo de 15 días para que dé explicaciones al respecto. La petición data del pasado 29 de julio, pero Urra prefiere considerar el mes de agosto como inhábil a efectos administrativos. "Entenderé que el Ayuntamiento de Madrid no contesta si el próximo 15 de septiembre no tengo la respuesta en mi despacho", precisó.

Deficiencias

El grupo municipal socialista ha recibido con júbilo esta iniciativa del Defensor del Menor. Su portavoz en la comisión de Cultura, el edil Rafael Simancas, lleva desde hace meses denunciando las deficiencias de la red municipal de escuelas de música, que no se ha ampliado con un solo centro nuevo desde 1989, pese al aumento en el número de interesados por cursar este tipo de estudios."El Defensor del Menor acaba de poner en evidencia la absoluta falta de voluntad del Ayuntamiento de Madrid, a través de su equipo de gobierno, para dar salida a la enorme demanda de enseñanza musical que existe en la ciudad", proclama el edil del PSOE. Y remacha: "A ver si el Defensor del Menor tiene un poco más de suerte que nosotros...".

Simancas siempre ha argumentado que Madrid debería contar con una escuela por cada uno de los 21 distritos, para lo que habría que triplicar la oferta actual en esta materia. En su escrito, Urra le pregunta al concejal Gómez Angulo por "las medidas adoptadas o previstas para adecuar la oferta de plazas a la demanda de la población, con atención a las recomendaciones del Consejo de la Unión Europea". Este organismo cifró el número ideal de plazas para el aprendizaje del lenguaje musical en un 2% del total de la población, lo que, en el caso de Madrid capital, se traduciría en 57.000.

Mayores de ocho años

Por último, el Defensor del Menor también se confiesa perplejo por la más reciente novedad decidida por el Ayuntamiento de Madrid e introducida en las normas de matriculación de estos centros de enseñanza musical: la no admisión en primer curso de todos aquellos chiquillos mayores de ocho años. El concejal socialista Rafael Simancas ha denunciado esta práctica como una burda fórmula ideada por los gestores del Partido Popular para ahorrar dinero (ya que los niños tan pequeños sólo se apuntan en lenguaje musical o antiguo solfeo, y no en un instrumento) y está convencido de que la concejalía de Cultura "no hace más que buscar fórmulas para no perjudicar los intereses de las academias privadas", mucho más caras.Urra no llega a hacer una interpretación tan beligerante con el actual equipo de gobierno del Ayuntamiento de Madrid, pero sí ha incluido en su demanda de información una apostilla que se refiere a las novedades en los requisitos de matriculación.

Urra ha interrogado al responsable de Cultura sobre "los criterios de edad mínima de matriculación de alumnos". Se trata de una inquietud "en coherencia con las denuncias publicadas en los medios de comunicación", corroboró.

La respuesta a todas las preocupaciones del Defensor del Menor deberá llegar en unos días. Si el gobierno municipal opta por el silencio aparecerá en la lista negra del Defensor del Menor, donde figuran las administraciones públicas que no han querido colaborar con esta institución, creada hace dos años para velar por los derechos del menor.