El fiscal interna a ocho de los 13 menores acusados de violar a cuatro niñas en Gandía
La fiscalía de menores de Valencia ha decidido mantener internados a ocho de los 13 menores de Gandia acusados de violar y abusar sexualmente durante meses de cuatro niñas de esta localidad. Ayer declararon seis de estos menores en la comisaría de Gandia y cinco de ellos, de 9 a 14 años, fueron enviados al centro de menores de la Generalitat en Burjassot para que declaren hoy ante la fiscalía de menores. Estos cinco menores se unen a los tres que ya estaban internados. El otro implicado que declaró ayer, de 17 años, queda sometido al igual tratamiento judicial que los adultos. Muchas de las ...
La fiscalía de menores de Valencia ha decidido mantener internados a ocho de los 13 menores de Gandia acusados de violar y abusar sexualmente durante meses de cuatro niñas de esta localidad. Ayer declararon seis de estos menores en la comisaría de Gandia y cinco de ellos, de 9 a 14 años, fueron enviados al centro de menores de la Generalitat en Burjassot para que declaren hoy ante la fiscalía de menores. Estos cinco menores se unen a los tres que ya estaban internados. El otro implicado que declaró ayer, de 17 años, queda sometido al igual tratamiento judicial que los adultos. Muchas de las víctimas y agresores convivían en Benipeixcar, uno de los barrios más deprimidos. Pese a su corta edad, algunos de los niños ya eran conocidos de la fiscalía de menores y habían cumplido medidas judiciales por hurtos, pequeños delitos y absentismo escolar. Algunos eran amigos del hermano de la niña que ha denunciado los abusos y tres de los acusados son hermanos.
Las pequeñas, con edades de ocho a 12 años, sufrieron los supuestos abusos durante casi dos años en un solar abandonado. El miedo les hizo callar. Finalmente, la madre de una de las niñas de 9 o 10 años, conoció los abusos y la llevó a una pediatra, que detectó le escoriaciones y una posible rotura de himen provocada por los abusos. "Se la follan todos", confesó el hermano de la víctima a la pediatra, que el pasado 25 de mayo acudió al Teléfono del Menor de la Generalitat en busca de ayuda psiquiátrica para la niña.
La llamada alertó a los servicios sociales y a la fiscalía de menores. Tras las pesquisas de los agentes, que hablaron con las cuatro supuestas víctimas, el pasado 12 de agosto la fiscalía decidió internar en el centro de Burjassot a siete niños: uno de 15 años, dos de 14, dos de 13, uno de 12 y otro de 11. El día siguiente declararon ante el fiscal, que permitió que cuatro de ellos, los más pequeños, quedaran bajo la custodia de sus padres.
En cambio, el fiscal considera que los otros tres fueron partícipes activos de los abusos, por lo que ordena que sigan internados y solicita al psicólogo del centro de menores un estudio psicosocial, escolar y familiar de los acusados, así como una propuesta de reeducación.
La mayoría de los implicados tiene entre 12 y 16 años, por lo que están bajo los juzgados de menores. Aunque la ley exime a los menores de 12 años, la comisionada del menor de la Generalitat y directora general de Asuntos Sociales, María Luisa García Merita, avanzó su intención de apartarlos de la custodia paterna, si se demuestra que no están correctamente atendidos.