Las negociaciones se tensan en el último tramo del pacto lingüístico

Las negociaciones para alcanzar un pacto lingüístico se tensaron ayer de forma muy acusada. A tres días vista de que se someta el dictamen en su integridad a votación en el pleno del Consell Valencià de Cultura (CVC), los representantes del PP se mostraron contrarios a la inclusión de una referencia a que los trabajos del nuevo ente normativo deberán partir de la normativa consolidada en los últimos años, tanto en la comunidad educativa como en la mayor parte de la Administración valenciana, y que está basada en las Normas del 32. Según fuentes del CVC, había un compromiso de incorporar esta c...

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Las negociaciones para alcanzar un pacto lingüístico se tensaron ayer de forma muy acusada. A tres días vista de que se someta el dictamen en su integridad a votación en el pleno del Consell Valencià de Cultura (CVC), los representantes del PP se mostraron contrarios a la inclusión de una referencia a que los trabajos del nuevo ente normativo deberán partir de la normativa consolidada en los últimos años, tanto en la comunidad educativa como en la mayor parte de la Administración valenciana, y que está basada en las Normas del 32. Según fuentes del CVC, había un compromiso de incorporar esta cuestión en la redacción del dictamen definitivo cuando se elaboró el informe sobre la lengua que aprobó el sábado el CVC. El desacuerdo fue muy pronunciado entre los representantes de los populares y los socialistas en la reunión de la comisión de redacción que mantuvieron ayer. A última hora, sin embargo, y a pesar de las discrepancias, se decidió continuar con las negociaciones para alcanzar una acuerdo en este sentido. Mientras tanto, el PP continúa intentando sumar a buena parte del secesionismo lingüístico al dictamen. PASA A LA PÁGINA 3

El Institut Joan Lluís Vives tilda de gran paso el acuerdo del CVC

VIENE DE LA PÁGINA 1 Así pues, durante el día de hoy y presumiblemente todo el fin de semana, las negociaciones entre los dos partidos mayoritarios y sus representantes en el CVC continuarán. El PP sigue intentando captar a una parte del secesionismo lingüístico y evitar así el voto negativo al dictamen del consejero Xavier Casp, quien ya se opuso al informe de la ponencia sobre la lengua. Casp anunció el miércoles que hoy la Academia de Cultura Valenciana se reuniría con el presidente de la Generalitat, Eduardo Zaplana, y condicionó su postura definitiva a este encuentro. Sin embargo, en la agenda del titular del Consell no aparece ninguna reunión con esta entidad defensora del secesionismo lingüístico, aunque es posible que se produzca a última hora. Por su parte, Carmen Morenilla,consejera a propuesta de EU, y otros consejeros de izquierdas, manifestaron ayer su contrariedad por algunas declaraciones vertidas últimamente por Manuel Muñoz y Joaquín Calomarde, consejeros por el PP, respecto al dictamen y con la finalidad de atraer a los secesionistas. En ellas se dice que la definición del valenciano como variedad dialectal del catalán del Diccionario de la Real Academia Española de la Lengua ya no es válida (según Muñoz) y se incluye el valenciano como una lengua más, junto al gallego, el vasco y el catalán. El presidente de Unión Valenciana (UV), Héctor Villalba, por su parte, reiteró ayer que su partido aceptará el dictamen si así lo hace la Academia de Cultura Valenciana. El Institut Interuniversitari Joan Lluís Vives, al que pertenecen un total de 14 universidades de Cataluña, la Comunidad Valenciana y las Islas Baleares, ha lamentado el hecho de que el dictamen del CVC haya desestimado al Institut Interuniversitari de Filologia Valenciana como ente normativo, "ya que la universidad es la institución científica por excelencia". En cualquier caso, fuentes del citado Institut, reunidas ayer en Palma de Mallorca, manifestaron su esperanza de que el organismo que se cree respete el dictamen. Asimismo añadieron sobre el dictamen: "Pese a ser fruto de un debate ajeno a los criterios de la comunidad científica, es un gran paso para asegurar la lengua que compartimos y con la que nos relacionamos diariamente, ya la llamemos valenciano o catalán". Por su parte, el rector de la Universitat Jaume I de Castellón, Fernando Romero, ha valorado positivamente el "esfuerzo" realizado por el Consell Valencià de Cultura a la hora de emitir un dictamen "con ciertos elementos a valorar". Romero se expresó en los mismos términos que el Institut Joan Lluís Vives al indicar que "espero que el desarrollo sea respetuoso con la comunidad científica y que el futuro ente normativo respete lo que establece el dictamen en lo referente a la independencia del poder político y la solvencia científica del futuro organismo". En este sentido, señaló que el Institut "debería tener un papel importante".

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