Esfuerzo mínimo
La Bolsa se ha sumado en esta última sesión a la moda dominante, consistente en obtener el máximo rendimiento con los mínimos costes. Los índices se han acercado a los niveles máximos históricos, con unos niveles de negocio muy bajos, tanto que, de haber mantenido esa tónica hace tres meses, difícilmente se habrían conseguido.
Una vez más han sido los grandes valores del mercado los que se han quedado con la mayor parte del negocio, con lo que los 126.565 millones de pesetas contratados en el mercado continuo apenas dejan margen para los valores medios y pequeños.
La separación e...
La Bolsa se ha sumado en esta última sesión a la moda dominante, consistente en obtener el máximo rendimiento con los mínimos costes. Los índices se han acercado a los niveles máximos históricos, con unos niveles de negocio muy bajos, tanto que, de haber mantenido esa tónica hace tres meses, difícilmente se habrían conseguido.
Una vez más han sido los grandes valores del mercado los que se han quedado con la mayor parte del negocio, con lo que los 126.565 millones de pesetas contratados en el mercado continuo apenas dejan margen para los valores medios y pequeños.
La separación entre los valores con liquidez garantizada y aquellos que sólo se animan cuando entra dinero de refresco, el de los pequeños inversores, es cada día más grande y viene a confirmar la división de hecho que se hizo en el mercado traspasando a un buen número de valores a la modalidad de fixing, o contratación a precio fijo en dos momentos concretos.
Ahora que se habla de formar un gran mercado europeo en el que se podrán integrar los grandes valores de cada Estado miembro de la UE, cobra cuerpo esa idea de dividir el mercado tomando como criterio la liquidez, aunque nadie parece capaz de medir las consecuencias.
El mercado de deuda permanece estancado, aunque a lo largo de esta jornada se consiguieron rentabilidades menores que las del día anterior y el diferencial se redujo una centésima. En el momento del cierre hubo retiradas de beneficios que llevaron otra vez la rentabilidad de la deuda a 10 años hasta el 4,95% al tiempo que situaban el diferencial con Alemania en 0,24 puntos, el mismo del martes.
Para algunos observadores, ya es bastante con que la deuda se mantenga sin problemas por debajo del 5%, y eso justificaría la escasez de papel y la relativa facilidad con que suben las cotizaciones estos días. Los inversores que operan con futuros apuntan alto, y la Bolsa no hace más que seguir la orientación que le proponen, aunque sea en solitario.
[Wall Street cerró la sesión con un fuerte avance de 89,93 puntos, un 0,99%. El índice Dow Jones quedó en 9.174,97].