Un millón de empleos fijos más en el primer año de reforma laboral
El primer año de la aplicación de los Acuerdos sobre Estabilidad en el Empleo y Negociación Colectiva, firmado por la patronal y los sindicatos, se ha saldado con un balance positivo. Desde su entrada en vigor, el 17 de mayo de 1997, se han registrado en el Inem casi un millón de contratos indefinidos, según el Ministerio de Trabajo.De ese millón de contratos, más de 650.000 fueron bonificados al amparo de la reforma laboral. Además se registraron más de 130.000 contratos formativos. Tanto el Gobierno como los sindicatos y la patronal valoran positivamente los acuerdos y el cambio de tendencia...
El primer año de la aplicación de los Acuerdos sobre Estabilidad en el Empleo y Negociación Colectiva, firmado por la patronal y los sindicatos, se ha saldado con un balance positivo. Desde su entrada en vigor, el 17 de mayo de 1997, se han registrado en el Inem casi un millón de contratos indefinidos, según el Ministerio de Trabajo.De ese millón de contratos, más de 650.000 fueron bonificados al amparo de la reforma laboral. Además se registraron más de 130.000 contratos formativos. Tanto el Gobierno como los sindicatos y la patronal valoran positivamente los acuerdos y el cambio de tendencia en la calidad del empleo, aunque las organizaciones sindicales critican el mantenimiento del uso abusivo de los contratos temporales. Por ello, los sindicatos han pedido al Gobierno que aumente la cotización por desempleo en este tipo de contratos, mientras que la patronal se muestra contraria a cualquier penalización para corregir la tasa de temporalidad porque considera que aumentaría los costes laborales y perjudicaría la creación de empleo. Los secretarios generales de CCOO y de UGT, Antonio Gutiérrez y Cándido Méndez, y los presidentes de CEOE y de Cepyme, José María Cuevas y Antonio Masa, se reunirán el próximo miércoles para hacer un balance del primer año de la reforma. Por su parte, Antonio Navarro, presidente de la Asociación de Parados (Adepa), ha enviado una segunda carta al rey Juan Carlos para pedirle una audiencia en la que quiere exponerle las reivindicaciones de la organización. La Casa Real ya ha contestado a una petición anterior que la agenda del jefe del Estado está cargada de compromisos.