Personas de la tercera edad, principales víctimas de la "estafa de los euros", descubierta en Vilanova

Personas de la tercera edad han sido las principales víctimas de un nuevo tipo de estafa descubierto en los últimos días en la comarca del Garraf: la estafa de los euros. Se trata de un engaño que ha permitido a los estafadores conseguir botines de hasta 40.000 pesetas en una sola visita, según las denuncias presentadas en la comisaría de policía de Vilanova i la Geltrú. Los estafadores se presentan en el domicilio de la víctima y roban del buzón una carta de algún banco o caja de ahorros, lo cual les permite averiguar de qué entidad financiera es clienta una persona a la que han venido obse...

Personas de la tercera edad han sido las principales víctimas de un nuevo tipo de estafa descubierto en los últimos días en la comarca del Garraf: la estafa de los euros. Se trata de un engaño que ha permitido a los estafadores conseguir botines de hasta 40.000 pesetas en una sola visita, según las denuncias presentadas en la comisaría de policía de Vilanova i la Geltrú. Los estafadores se presentan en el domicilio de la víctima y roban del buzón una carta de algún banco o caja de ahorros, lo cual les permite averiguar de qué entidad financiera es clienta una persona a la que han venido observando. A continuación, llaman a la puerta de esa persona, muestran la carta y se identifican como empleados de la caja o del banco. El estafador informa al vecino de que el plazo para cambiar las pesetas por euros está a punto de finalizar y corre el riesgo de perder para siempre los ahorros que guarda en casa. El timador se ofrece para cambiarle las pesetas por euros, para evitar molestias y desplazamientos. A continuación, el estafador se va del domicilio de la víctima con las pesetas en el bolsillo y con la promesa de que volverá con los euros. Una caja de ahorros de Vilanova i la Geltrú se ha puesto en contacto con la policía porque clientes de esa entidad han recibido la visita de los falsos empleados, que siempre se presentan impecablemente vestidos. Las víctimas suelen ser jubilados-la mayoría viven solos- que desconocen con exactitud cuándo entra en vigor el euro.