Las obras de la M-45 empezarán este verano y los primeros coches podrán usarla el año 2000

La Consejería de Obras Públicas y Transportes ya ha puesto fecha al inicio de la M-45: el 9 de junio adjudicará los proyectos de la primera carretera que se hará por el sistema de peaje en la sombra. Las empresas desembolsarán los 40.000 millones que costará la M-45 y podrán gestionarla 25 años. Durante ese tiempo, el Gobierno regional pagará un canon por cada coche que la utilice. Los primeros coches pasarán por los 36 kilómetros de la "superautovía", como la califica el consejero de Obras Públicas, Luis Eduardo Cortés, en el año 2000.

El responsable de la Consejería de Obras Públic...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

La Consejería de Obras Públicas y Transportes ya ha puesto fecha al inicio de la M-45: el 9 de junio adjudicará los proyectos de la primera carretera que se hará por el sistema de peaje en la sombra. Las empresas desembolsarán los 40.000 millones que costará la M-45 y podrán gestionarla 25 años. Durante ese tiempo, el Gobierno regional pagará un canon por cada coche que la utilice. Los primeros coches pasarán por los 36 kilómetros de la "superautovía", como la califica el consejero de Obras Públicas, Luis Eduardo Cortés, en el año 2000.

Más información

El responsable de la Consejería de Obras Públicas ha decidido dividir los 36 kilómetros que tendrá la M-45 en tres tramos. El primero de ellos, de 14,10 kilómetros, abarca desde la nacional II (Torrejón) hasta el eje de O'Donnell. La "carretera más necesaria de Madrid" para Luis Eduardo Cortés continúa desde ese punto hasta la autovía de Andalucía (N-IV). Éste, con 14,5 kilómetros, es el más largo de los tres tramos. La M-45 se prolonga con los 7,5 kilómetros que abarca el tercer tramo entre la N-IV y la M-40 pasado el barrio de La Fortuna (Leganés). En total, 36 kilómetros de calzada vitales para el futuro de la ciudad."Va a absorber todo el tráfico pesado que venga por el corredor del Henares y lo lleva directamente hasta la carretera de Andalucía. Resuelve todo el tráfico pesado del sur al norte y del norte al sur. Además, gran parte del desarrollo de Madrid va hacia el este. No sería posible acometer esas obras sin la M-45", explica el consejero.

Cortés ha calculado un coste medio de 1.100 millones de pesetas por kilómetro: 15.400 millones el primer tramo; 17.500, el segundo y 8.800, el último. Un dinero que será desembolsado por las empresas que se adjudiquen el 9 de junio los tres proyectos (uno para cada tramo). A cambio de esa in versión, obtienen el derecho a gestionar la autovía durante 25 años. A lo largo de ese tiempo, la Comunidad pagará a las empresas una cantidad por cada vehículo que pase por la M-45.

Las reglas del juego marcadas por la Comunidad para ese peaje en la sombra incluyen un sistema de doble control para evaluar el número de coches que transiten cada día los seis carriles (tres en cada dirección). El primero de ellos, controlado por las empresas, consiste en unas espiras enterradas en el firme. Se trata de un sistema de cables, protegidos por un tubo de plástico, que emite a un sistema de control, ubicado en una caseta, una señal cada vez que un coche pasa sobre él.

El segundo método de contabilización de vehículos, realizado por la Consejería, consiste en un sistema de cámaras que grabarán la circulación en los mismos puntos donde se encuentren enterradas las espiras.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

"La Administración tiene que comprobar que las mediciones que realicen las empresas concesionarias se ajustan a la realidad. Haremos nuestras mediciones al menos una vez al mes, durante un día completo, mediante un tratamiento informático de las imágenes grabadas", dice Francisco Javier de Águeda, director de Carreteras.

Validez de las mediciones

La Comunidad dará por válidas las mediciones de las empresas si sólo hay una variación del 2% en la cifra de vehículos ligeros y del 5% en el de pesados. "La concesionaria hace la obra. Cuando ésta termina se inaugura y, a partir del mes, la Comunidad empieza a pagar un canon por cada vehículo, pero a partir de un determinado número de coches no pagaremos nada", explica Cortés. Esa frontera máxima deben fijarla en sus ofertas las empresas que concurran al concurso convocado por Obras Públicas. "No puede ser superior a un determinado nivel de capacidad de la carretera, que está vinculado con la comodidad de circulación del usuario. El canon variará también en función de la disminución de los accidentes en la carretera", concluye el consejero. "A menos siniestros, más dinero", concluye De Águeda.

Archivado En