Londres decidirá en referéndum si quiere tener un alcalde

La búsqueda de un hombre (o una mujer) capaz de lidiar con los problemas municipales de Londres quedó ayer abierta y en un santiamén llovieron candidatos. Los planes del Gobierno laborista para instalar al primer jefe del Ayuntamiento de la capital británica entusiasman a personajes que van desde el multimillonario novelista Jeffry Archer, que quiere emular al alcalde de Nueva York, Rudolph Giuliani, hasta el exponente más popular del ambiente izquierdista londinense como el parlamentario Ken Levingstone.El Gobierno ha fijado para el 7 de mayo un referéndum para responder a una pregunta para l...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

La búsqueda de un hombre (o una mujer) capaz de lidiar con los problemas municipales de Londres quedó ayer abierta y en un santiamén llovieron candidatos. Los planes del Gobierno laborista para instalar al primer jefe del Ayuntamiento de la capital británica entusiasman a personajes que van desde el multimillonario novelista Jeffry Archer, que quiere emular al alcalde de Nueva York, Rudolph Giuliani, hasta el exponente más popular del ambiente izquierdista londinense como el parlamentario Ken Levingstone.El Gobierno ha fijado para el 7 de mayo un referéndum para responder a una pregunta para la cual todos ya tienen una respuesta que es sonoramente afirmativa: "¿Debe Londres tener un alcalde?". Cinco millones de electores de la capital británica deberán luego seleccionar un alcalde en una pugna que se presenta sumamente disputada.

La creación del puesto representa, entre otras cosas, la defunción del título de Lord Mayor of London que a lo largo de la historia gobernó el ambiente urbano de la capital con sus 32 distritos a los que el Gobierno central ignoró siempre. Margaret Thatcher suprimió hace casi veinte años el Consejo del Gran Londres, lo más parecido a un Ayuntamiento que ha tenido la capital británica.

El Gobierno de Tony Blair quiere que Londres, al igual que París, Madrid o Estocolmo, tenga un alcalde electo. "Queremos que Londres tenga una voz y que su Gobierno represente al pueblo de Londres", declaró John Prescott, el viceprimer ministro del Gobierno laborista.

El proyecto no se va a concretar antes del año 2000, pero candidatos no faltan aparte de Ken Levingstone o la ministra de Transportes, la actriz Glenda Jackson. El nombre de Richard Branson, zar de la compañía Virgin también figura entre los potenciales aspirantes a una posición que, con un presupuesto de 3.000 millones de libras esterlinas (780.000 millones de pesetas), garantiza poder y glamour en la capital británica.

Archivado En