El PNV deja de exigir la transferencia del Inem como condición para apoyar al Gobierno

, El Gobierno acentuará su política de gestos hacia sus socios, CiU y el PNV, que gobiernan en Cataluña y el País Vasco, haciéndoles partícipes de la política de Estado. A su vez, los nacionalistas plantearán reclamaciones asumibles por el Ejecutivo con la clara pretensión de prorrogar el acuerdo de gobernabilidad durante 1998. Así, el PNV no va a hacer bandera de su petición más emblemática, la gestión de las cuotas del Inem, para seguir respaldando a José María Aznar. Otro tanto sucede con CiU, que renuncia a plantear ahora la reclamación de los impuestos especiales o el pacto fiscal.
...

, El Gobierno acentuará su política de gestos hacia sus socios, CiU y el PNV, que gobiernan en Cataluña y el País Vasco, haciéndoles partícipes de la política de Estado. A su vez, los nacionalistas plantearán reclamaciones asumibles por el Ejecutivo con la clara pretensión de prorrogar el acuerdo de gobernabilidad durante 1998. Así, el PNV no va a hacer bandera de su petición más emblemática, la gestión de las cuotas del Inem, para seguir respaldando a José María Aznar. Otro tanto sucede con CiU, que renuncia a plantear ahora la reclamación de los impuestos especiales o el pacto fiscal.

José María Aznar acudirá estasemana con una expectativa serena a sus reuniones con sus aliados nacionalistas, Jordi Pujol y Xabier Arzalluz, para renovar sus pactos de gobernabilidad. La oferta principal de Aznar a sus socios se centra, según fuentes gubernamentales, en una acentuación de la política de gestos, que se traduce en hacerles partícipes de sus planes de Gobierno, como las rebajas del IRPF y los programas de empleo que se han anunciado tras el Consejo de Ministros del pasado viernes.El jefe del Gobierno juega con las bazas de la entrada de España en la Unión Monetaria, el próximo mes de mayo, y la buena marcha de la economía al realizar su oferta a CiU y el PNV, porque parte de la base de que su coparticipación en tales planes les beneficia políticamente y, por tanto, no puede ser rechazada.

Aznar, en lo relativo al desarrollo autonómico, no va a moverse con sus socios en un terreno delicado, informan las mismas fuentes gubernamentales. Este miércoles se comprometerá con Pujol en el área de infraestructuras -la construcción del AVE y la ampliación del aeropuerto y el puerto de Barcelona, entre las más importantes-, así como en el desarrollo de la policía autonómica, los mossos d´esquadra, y la competencia de Tráfico. Las cuestiones más cruciales que Pujol ha planteado en los últimos meses, como el pacto fiscal o la cesión de los impuestos especiales, no pasarán de un sondeo para el futuro.

Tampoco respecto al PNV se pondrá sobre la mesa de negociación la cesión al Gobierno vasco de la gestión de las cuotas del Instituto Nacional de Empleo (Inem). El portavoz peneuvista en el Congreso, Iñaki Anasagasti, cree que aún hay un margen importante en el desarrollo estatutario como para plantear esta reclamación como condición indispensable para seguir apoyando al Gobierno.

La posición del PNV en el encuentro que mantendrán su líder, Xabier Arzalluz, y el lehendakari, José Antonio Ardanza, con Aznar y el ministro del Interior, Jaime Mayor, consistirá en mantener el apoyo parlamentario al Ejecutivo en la medida en que vaya respondiendo a sus reclamaciones.

Encuentro pospuesto

Este encuentro debía haberse celebrado el pasado sábado, pero se suspendió a causa del asesinato de José Ignacio Iruretagoyena, concejal del PP en Zarautz, por parte de ETA, y ahora es posible que se fije para el próximo fin de semana.El PNV planteará como temas centrales, en relación con el desarrollo autonómico, la titularidad de las autopistas y otras cuestiones pendientes de traspaso referentes a investigación científica o turismo. Otro aspecto pendiente de cerrar para el PNV es la concreción de la devolución del patrimonio incautado durante la guerra civil, una vez que el Consejo de Ministros reconociera legalmente sus derechos. La del Inem queda momentáneamente aparcada.

Arzalluz y Ardanza llegan a las conversaciones con Aznar con la presión sindical vasca mucho más amortiguada. La central ELA-STV, motor de la llamada tercera vía -propuesta intermedia entre las posiciones autonomistas y las de ETA como camino hacia la pacificación-, es la que más ha forzado al Gobierno vasco a que asuma con firmeza la petición del Inem. Pero tampoco está en estos momentos en las mejores condiciones para hacerlo ante el fracaso, al menos por ahora, de la mencionada opción, dada la campaña de asesinatos que ha emprendido la banda terrorista.

En cualquier caso, el aplazamiento de la reclamación del Inem en la renovación del pacto de Gobierno no supone su renuncia a largo plazo. En estos momentos, el PNV centra sus reivindicaciones autonómicas en cuestiones menos conflictivas. Sólo ante una de ellas, Anasagasti mantiene especial beligerancia. El portavoz acusa al secretario de Estado de Cultura, Miguel Ángel Cortés, de "actuar al margen de los acuerdos del Gobierno con el PNV" y en "convergencia don gente muy crítica con el nacionalismo, como Aleix Vidal-Quadras", ante solicitudes vascas como la del traslado del Guernica de Picasso. al Museo Guggenheim de Bilbao.

Anasagasti deja abiertas las relaciones con el Gobierno: "Le apoyaremos en el Parlamento en la medida que atienda nuestras reclamaciones". Con esta posición, el PNV tiene las manos libres para respaldarlo o dejarlo de hacer; sobre todo, en un año que va a estar marcado por las elecciones autonómicas vascas, que se celebrarán el próximo otoño.