La tolerancia impregna la ceremonia de los Ondas

Si algo impregnó ayer la ceremonia de los Premios Ondas en Barcelona, que concede la cadena SER, fue el espíritu de la tolerancia. Los mundos del cine, la música, la radio y la televisión se volcaron en la cita de los galardones, que contó con la presencia del alcalde de la ciudad, Joan Clos, y del presidente del Grupo PRISA, Jesús de Polanco. Los 35 premios concedidos este año se entregaron anoche en el Palau Nacional de Montjuïc. Se echó en falta a Pilar Miró, la cineasta fallecida y galardonada por su trayectoria profesional. Su hijo Gonzalo recogió su Ondas. Fue el momento más emotivo de l...

Si algo impregnó ayer la ceremonia de los Premios Ondas en Barcelona, que concede la cadena SER, fue el espíritu de la tolerancia. Los mundos del cine, la música, la radio y la televisión se volcaron en la cita de los galardones, que contó con la presencia del alcalde de la ciudad, Joan Clos, y del presidente del Grupo PRISA, Jesús de Polanco. Los 35 premios concedidos este año se entregaron anoche en el Palau Nacional de Montjuïc. Se echó en falta a Pilar Miró, la cineasta fallecida y galardonada por su trayectoria profesional. Su hijo Gonzalo recogió su Ondas. Fue el momento más emotivo de la velada.

Gonzalo recogió el premio entre atronadores aplausos después de que Iñaki Gabilondo, que presentó la gala junto a Gemma Nierga, recordara que Miró "era, es y será un verdadero símbolo de muchas cosas". Antes, se habían proyecta do imágenes en las que la cineasta evocaba momentos de su vida. Casi al final de la ceremonia, que hoy emitirá Canal + en abierto, hubo otro momento entrañable: la entrega del Ondas a Raimon, largamente aplaudido. El cantautor hizo votos para que el galardón fuera por sus "36 años de pro fesión" y no en desagravio por el abucheo de Las Ventas. "Aquello fue lo que fue, y nada más", dijo. En la gala, hablaron Raimon y El Gran Wyoming. Éste aportó el humor y la ironía, igual que había hecho horas antes cuando se presentó a una recepción en el palacete Albéniz con una bolsa llena de butifarras y longanizas. Por la noche, y en referencia al galardón a Caiga quien caiga como espacio más innovador, bromeó en tono socarrón: "Agradezco el premio al mejor informativo de ciencia-ficción, claro que presentándose el de Sáenz de Buruaga, el mío tampoco es tan justo". La nota discordante del espectáculo, dirigido por Lluís Pasqual y que tuvo la impagable colaboración de Ángel Pavlosky en el papel de una supuesta regidora, la pusieron las Spice Girls, que se negaron durante unos minutos a actuar porque había fotógrafos en la sala. Al final, cantaron. Pero el público no les perdonó el desaire y las silbó con ganas. En cambio, los Backstreet Boys, Alejandro Sanz, Carlos Núñez y Ana Torroja se metieron a los asistentes en el bolsillo.Los galardonados recibieron la simpatía de un público que llenaba la gran sala oval del palacio.

Al mediodía, durante la recepción de homenaje a los galardonados en el palacete Albéniz, Jesús de Polanco, tras resaltar los méritos de los premiados, destacó los de Raimon, quien "con su música y sus palabras", afirmó, "en determinados momentos, ha expresado lo que otros no sabían o no se atrevían a expresar". En el almuerzo, Clos subrayó la importancia que tienen los Ondas para Barcelona.

Durante la recepción, los premiados comentaban su obra galardonada. Como el director y el productor de Secretos del corazón, Montxo Armendáriz e Imanol Uribe. "El filme es arriesgado, realizado a contracorriente. En realidad, es una joya que nos ha dado la gran sorpresa de conectar de esa manera tan especial con el público y la crítica", dijo Uribe. Armendáriz no se atrevía a calificar Secretos. del corazón como su mejor película. "Para mí son todas iguales y diferentes", señaló.

Para buscar a Ricardo Franco sólo había que atisbar su inconfundible sombrero-. Junto al director de La buena estrella estaba Antonio Resines, el actor que ha tenido que hacer este drama para que se le reconozca toda su carrera. "Ahora sólo me ofrecen dramones", se lamentaba Resines.

Si alguien estaba de acuerdo con las razones dadas en los Ondas para su premio, esos eran José Luis López Linares y Javier Rioyo. "Asaltar los cielos ha abierto un camino en el mundo del documental", dijeron los galardonados, que preparan otro trabajo con brigadistas internacionales.

Muy sonriente estaba el gaitero Carlos Núñez. "El directo es la razón de ser de un músico y un artista. En el disco [A irmandade das estrelas] he intentado capturar esa energía y la dificultad del directo". Los que se movían como pez en el agua eran los componentes de Ketama. Por algo el de ayer era su tercer Ondas, pero también el más querido. "Hemos apostado muy fuerte. Ha sido un disco de búsqueda de fusiones nuevas", dijo Juan Carmona.

En nombre de Todos los hombres sois iguales, de Tele 5, estaban el director, Jesús Font, y el actor Josema Yuste. Font alabó los premios porque "los concede la profesión". En el caso de su serie, afirmó que el valor del galardón radica en que no se trata de un producto "políticamente correcto".

A los actos de los Ondas asistieron compañeros de los galardonados, representantes de medios de comunicación como el editor de La Vanguardia, Javier Godó, y políticos como el consejero de Presidencia de la Generalitat, Xavier Trias, y la delegada del Gobierno en Cataluña, Julia García-Valdecasas.