El PP da otro plazo al denunciante del 'caso Zamora' para que se arrepienta
Antolín Martín, presidente de la Diputación de Zamora y denunciante del cobro de comisiones ilegales a constructores locales desde ese organismo para el PP, tiene los días contados en el partido. El comité nacional de conflictos del PP le abrió un expediente y suspendió de militancia, como a cinco diputados que le acompañaron en su escisión, pero él no se ha defendido de los cargos que se le imputan. El comité le ha dado otro plazo de gracia, fuera de los estatutos, para que presente antes del lunes argumentos en su favor.
Antolín Martín no quiere hablar más, por ahora, del caso Zamora ...
Antolín Martín, presidente de la Diputación de Zamora y denunciante del cobro de comisiones ilegales a constructores locales desde ese organismo para el PP, tiene los días contados en el partido. El comité nacional de conflictos del PP le abrió un expediente y suspendió de militancia, como a cinco diputados que le acompañaron en su escisión, pero él no se ha defendido de los cargos que se le imputan. El comité le ha dado otro plazo de gracia, fuera de los estatutos, para que presente antes del lunes argumentos en su favor.
Antolín Martín no quiere hablar más, por ahora, del caso Zamora que él destapó sobre una posible financiación irregular del PP. Sólo reclama que continúe la investigación abierta por la fiscalía. En el PP aún esperan sus respuestas.Hace un par de, semanas, cuando Martín provocó la ruptura del Gobierno de la Diputación y se quedó al mando de esta institución junto a cinco diputados populares que le acompañaron en su fuga, el comité nacional de conflictos del PP les suspendió de militancia e inició un expediente sancionador. El comité les concedió entonces los 10 días reglamentarios para escuchar, a través de un pliego de cargos, sus justificaciones. Los cinco diputados afectados, el vicepresidente primero Gonzalo García, el vicepresidente segundo Valentín Posado, y los parlamentarios Javier Aguado, Efrén Domínguez y Juan Antonio Sastre, remitieron sus pliegos en tiempo y forma. El comité de conflictos los está estudiando.
Antolín Martín, sin embargo, no ha contestado. El responsable del comité nacional de conflictos, Carlos Argos, envió el pasado martes un telegrama a Martín para alertarle de ese olvido y para concederle, al margen de lo que especifican los estatutos, un nuevo plazo de cinco días para recibir alguna respuesta. Esa gracia se acabará el lunes y de esa manera el PP se garantiza que Martín no pueda alegar en el futuro ningún tipo de indefensión.
Lo que el comité de conflictos del PP analiza no es la denuncia de la presunta corrupción, para la que el partido ha abierto una investigación interna cuyo resultado se conocerá hoy, sino el comportamiento "indisciplinado" de Martín y los cinco diputados.
Su falta de respeto a la dirección del partido se apreció cuando le ordenaron restituir en su puesto a dos vicepresidentes a los que destituyó tras alinearse en un congreso provincial contra su candidatura. El comité nacional de conflictos del PP ha actuado excepcionalmente, porque normalmente sólo se ocupa de los expedientes en curso sobre militantes aforados. Martín no es aforado. Este caso se ha considerado "por su trascendencia y para garantizar la mayor objetividad posible".
Por otra parte, la Diputación de Zamora creará en el pleno ordinario del próximo día 26 una comisión especial de investigación de este caso, según decidió ayer la Junta de Portavoces por unanimidad. La Diputación, gobernada por los seis diputados rebeldes, está integrada por nueve miembros del PP, nueve del PSOE y uno de IU. Esta propuesta de comisión investigadora, que partió formalmente de IU y a la que se sumó el PP, no ha encontrado consenso sobre cómo y por quién estará constituida.