El IRA anuncia que no habrá nueva tregua antes de las elecciones británicas
, Fuentes del movimiento republicano irlandés ligadas al IRA Provisional consideraron ayer "improbable" un nuevo alto el fuego de la organización terrorista antes de las próximas elecciones generales británicas. En declaraciones a la prensa en Dublín, en vísperas del aniversario -el 9 de febrero- de la ruptura de la última tregua de los provisionales, las mismas fuentes precisaron que el IRA carece de preferencias políticas en lo que al resultado de esas elecciones se refiere. Sin embargo, Martin McGuinness, número dos del Sinn Fein, el partido que representa a los ...
, Fuentes del movimiento republicano irlandés ligadas al IRA Provisional consideraron ayer "improbable" un nuevo alto el fuego de la organización terrorista antes de las próximas elecciones generales británicas. En declaraciones a la prensa en Dublín, en vísperas del aniversario -el 9 de febrero- de la ruptura de la última tregua de los provisionales, las mismas fuentes precisaron que el IRA carece de preferencias políticas en lo que al resultado de esas elecciones se refiere. Sin embargo, Martin McGuinness, número dos del Sinn Fein, el partido que representa a los provisionales, declaró ayer a la BBC que espera que el próximo primer ministro británico sea "un nuevo Frederik de Klerk", el presidente que dio pasó a la reconciliación racial en Suráfrica.Las fuentes próximas al IRA reiteraron a los periodistas irlandeses que la solución al problema de Irlanda del Norte requiere "negociaciones serias", sin imponer a los grupos paramilitares la condición previa de que entreguen sus armas. Londres se ha mantenido firme en su exigencia de forzar el decomiso de las armas del IRA antes de aceptar al Sinn Fein en la mesa negociadora que se inaguró en junio pasado. La firmeza británica en este sentido motivó, según la dirección del IRA, la decisión de la organización de romper la tregua acordada en septiembre de 1994 y regresar a la violencia.
Una guerra real
En este sentido, los portavoces del IRA recordaron también ayer al Gobierno de Londres que la guerra que mantienen no es falsa, sino muy real. Desde que los provisionales dieran por terminado el alto el fuego más largo en la historia reciente del conflicto de Irlanda del Norte -la tregua duró más de 17 meses- el 9 de febrero del año pasado, su actividad ha sido considerable, pero no tan mortífera como en el pasado.
La potentísima bomba que dañó varios edificios de oficinas en la ultramoderna zona de los Docklands de Londres ese 9 de febrero, causó dos víctimas mortales, atribuidas por el IRA a fallos de organización en el desalojo del área afectada. A lo largo de los últimos 12 meses, el IRA se ha responsabilizado de dos atentados graves, aunque sin víctimas mortales, uno de ellos en Irlanda del Norte, que se saldó con la destrucción de un hotel en Enniskillen, otro en Manchester, durante la celebración de la Eurocopa 96, en junio pasado.
Desde diciembre hasta ayer mismo, el IRA ha mantenido una política de hostigamiento creciente en Irlanda del Norte, con continuos ataques a miembros de la policía local (Royal Ulster Constabulary, RUC), el último de los cuales se produjo ayer, cuando un vehículo policial fue tiroteado en el condado de Armagh, sin que las balas llegaran a herir a sus ocupantes. Se trata del segundo ataque contra miembros de la RUC en menos de 24 horas.