LOS PAPELES DEL CESID

Serra confirma que los 20 'papeles del Cesid' coinciden con los devueltos por Perote

Los 20 papeles del Cesid publicados ayer por EL PAÍS, procedentes de los autos judiciales del caso GAL, coinciden con los documentos que hay en forma de microficha en el archivo del servicio de inteligencia. Pero como los papeles estuvieron fuera de control desde noviembre de 1991 a enero de 1992, "no hay forma de compulsar si coinciden con los originales", ya que pudieron ser manipulados por el coronel Juan Alberto Perote. Así lo aseguró ayer el ministro de Defensa, Eduardo Serra, en Bruselas, donde asistía a una reunión de la OTAN. Lo dijo tres veces. Sin embargo, por la tarde rectificó y se...

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Los 20 papeles del Cesid publicados ayer por EL PAÍS, procedentes de los autos judiciales del caso GAL, coinciden con los documentos que hay en forma de microficha en el archivo del servicio de inteligencia. Pero como los papeles estuvieron fuera de control desde noviembre de 1991 a enero de 1992, "no hay forma de compulsar si coinciden con los originales", ya que pudieron ser manipulados por el coronel Juan Alberto Perote. Así lo aseguró ayer el ministro de Defensa, Eduardo Serra, en Bruselas, donde asistía a una reunión de la OTAN. Lo dijo tres veces. Sin embargo, por la tarde rectificó y señaló que las coincidencias a las que se refería eran entre lo publicado ayer por EL PAÍS y el auto de Garzón que obra en poder de Defensa.

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"Parece haber una coincidencia sustancial", dijo el ministro al preguntársele si los papeles del Cesid publicados y los que obran en el ministerio tienen el mismo contenido.Ante la importancia de la respuesta del ministro, y al sugerir un miembro de su gabinete que quizá se había producido una mala interpretación entre la pregunta y su respuesta, este diario repreguntó: "¿Coincide el tenor literal de los documentos que obran en el archivo del servicio de inteligencia con los publicados hoy [por ayer] en su versión íntegra?". Serra dijo.: "¿Se refiere usted a si coinciden el papel publicado entrecomillado y el papel que se tiene? Digo que, a falta de un análisis detallado, parece que sí, que, coinciden".

El titular de Defensa añadió: "Repito que entre lo entrecomillado y los papeles parece que sí hay, en principio, una coincidencia, pero queda [pendiente] un análisis detallado". Serra recordó que los documentos originales "fueron sustraídos del Cesid" y estuvieron fuera de su control durante unos dos meses, antes de ser devueltos, y "no hay manera de compulsar" su exactitud, ya que pudieron ser manipulados por Perote.

"Los documentos originales se destruyeron, se hicieron unas microfichas que son las que fueron sustraídas", se perdió entonces su control, "y son las devueltas, de manera que no hay capacidad de adverar la correspondencia con los originales", explicó el ministro. Es decir, los papeles publicados coinciden con el contenido de esas microfichas, pero nadie sabe, salvo el ladrón, si éstas se corresponden con los papeles originales. Serra recordó que "esos papeles que han sido publicados son unos papeles que fueron sustraídos del centro del Cesid". Reiteraba así la coincidencia entre lo publicado y los documentos del Cesid.

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Horas más tarde, tras la difusión de sus palabras, Serra rectificó así: "Hay tres términos de referencia: los papeles publicados, los del sumario y los que están en el Cesid. ¿Coinciden unos con otros? Es posible que yo lo haya dicho, y no lo niego que coincidan con los del Cesid. Yo lo que tengo y lo que hemos estado viendo es el contraste entre los papeles solicitados por el juez Garzón y los aparecidos en la prensa. No he hecho referencia al tercer término porque son secretos. "Reiteró que los documentos del sumario y los publicados "son como dos gotas de agua", y que son los que el juez detalla en un auto, y no los que figuran en el Cesid, que son "materia clasificada". "No puedo desclasificar unos papeles cuyo contenido conozco y está declarado secreto", dijo. Y atribuyó la contradicción con su declaración matinal a no haber oído bien la pregunta.

La relevancia de lo manifestado por la mañana por Serra radica en que los jueces pretendían precisamente que el Gobierno autenticase los textos de que ellos disponen, que fueron intervenidos en la celda de Perote el pasado febrero.

El ministro de Defensa declaró que compartía con su colega de Interior, Jaime Mayor Oreja, la repugnancia por lo que se relata en los papeles, y tomó distancias sobre la nota del Cesid del pasado lunes en que se atribuía la publicación fascicular de los papeles por El Mundo a una "táctica de presión ante la próxima toma de decisiones judiciales". "Soy muy poco amigo", dijo, "de creer en conspiraciones. El Gobierno del presiente Aznar no tiene nada que temer de la existencia de presuntas conspiraciones".

Según Serra, con la publicación de documentos secretos "no se beneficia el crédito de España". Pero no se refería a los papeles del Cesid, cuya "publicidad no viene de ahora", sino a otros documentos restringidos, secretos o confidenciales de carácter estratégico-militar elaborados por la OTAN y publicados por El Mundo. Ya ha ordenado una "investigación exhaustiva para ver dónde se ha producido la filtración". Y anunció que "en pocas semanas" habrá resultados y se podrán "exigir responsabilidades".

Mayor Oreja explicó en Lisboa que el Gobierno no modificará su criterio sobre la desclasificación de los documentos del Cesid, a pesar de que sean conocidos en su totalidad y no constituyan ninguna amenaza para la seguridad nacional, informa Javier García. "El asunto", dijo Mayor Oreja, "está en manos del Tribunal Supremo y el Gobierno esperará a que las autoridades judiciales competentes se pronuncien".

El Consejo de Ministros del pasado 2 de agosto ya hizo constar que cuatro de los supuestos papeles del Cesid -las conversaciones entre el teniente Pedro Gómez Nieto y el comandante Enrique Rodríguez Galindo y el coronel Juan Alberto Perote; y los datos relativos al sello de los GAL presuntamente fabricado en el Cesid- no consta que existan ni hayan existido en los archivos del servicio secreto. Sobre los demás, alegó que afectan a la seguridad del Estado y que no puede autentificarlos, porque estuvieron descontrolados durante dos meses.

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