El presidente del Gobierno se reúne con Cuevas para evitar que CEOE quede fuera del Consenso
El Gobierno no quiere que la patronal CEOE quede fuera del consenso sobre las pensiones públicas. La tarea no es sencilla porque los empresarios piden una futura rebaja de las cotizaciones sociales difícilmente encajable en el propio Pacto de Toledo y en el acuerdo Gobierno-sindicatos. Los contactos secretos para encontrar la fórmula mágica son numerosos y al máximo nivel. En la mañana de ayer, el ministro de Trabajo, Javier Arenas, se reunió con el secretario general de CEOE, Juan Jiménez Aguilar, para expresarle la voluntad del Gobierno de mantener abiertas las conversaciones. Y, de forma in...
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El Gobierno no quiere que la patronal CEOE quede fuera del consenso sobre las pensiones públicas. La tarea no es sencilla porque los empresarios piden una futura rebaja de las cotizaciones sociales difícilmente encajable en el propio Pacto de Toledo y en el acuerdo Gobierno-sindicatos. Los contactos secretos para encontrar la fórmula mágica son numerosos y al máximo nivel. En la mañana de ayer, el ministro de Trabajo, Javier Arenas, se reunió con el secretario general de CEOE, Juan Jiménez Aguilar, para expresarle la voluntad del Gobierno de mantener abiertas las conversaciones. Y, de forma inminente, serán el presidente del Gobierno, José María Aznar, y su buen amigo el presidente de CEOE, José María Cuevas, quienes mantendrán un encuentro con el objetivo de intentar buscar una salida para que la patronal no quede fuera del consenso.[Cuevas hizo ayer unas declaraciones a Europa Press TV en las que reconocía que la patronal terminará firmando el acuerdo sobre pensiones. El presidente de CEOE señaló que su organización sigue negociando con el Ejecutivo y dijo que le parece muy bien que haya habido un acuerdo entre el Gobierno y los sindicatos. "Estoy seguro de que terminaremos firmando otro acuerdo trascendental los empresarios y el Gobierno y todos contentos", concluyó.]El ministro de Trabajo desea que se logre un consenso amplio y de hecho el Gobierno "no renuncia a un posible acuerdo con los empresarios", aunque admite que es difícil porque cuando los partidos lograron el Pacto de Toledo, en abril de 1995, la patronal CEOE no dio entonces su pleno apoyo.
Pacto bilateral
Arenas incluso ratificó que se barajan dos posibilidades: que los empresarios apoyen el documento elaborado por Trabajo y los sindicatos o un acuerdo bilateral Gobierno-patronal que no entre en contradicción con el primero. En el segundo caso, el objetivo es tratar de buscar "un común denominador" entre los dos documentos.Los dirigentes de UGT y CC OO no pusieron ayer ningún reparo a que se intente un pacto bilateral entre el Gobierno y la patronal, siempre que "no suponga restar ni mermar nuestro acuerdo". José María Fidalgo, el coordinador de estas negociaciones en nombre de CC OO, sugirió que el pacto bilateral será aceptado sin problemas por los sindicatos si tiene este contenido: "Un compromiso que no sólo garantice la estabilidad financiera de la Seguridad Social sino también rellenar el fondo de reserva. Si las pretensiones de la patronal no son desmesuradas, puede haber acuerdo".