RELEVO EN EL KREMLIN

Ceremonia a la medida en el Kremlim

El presidente de Rusia, Borís Yeltsin, debe a parecer hoy por primera vez en público desde hace mes y medio para tomar posesión de su cargo y jurarlo sobre la Constitución en una ceremonia que se celebrará en el Kremlin y que dará pistas sobre su salud.La ceremonia, cuyo diseño ha, cambiado varias veces sobre la marcha, tal vez para ajustarla a las necesidades de la salud del presidente, durará media hora y tendrá lugar en el Palacio del Krenilin (el antiguo Palacio de Congresos del Kremlin), según los planes efectuados hasta ayer. El Palacio, del Kremlin es un edificio de corte funcional que ...

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El presidente de Rusia, Borís Yeltsin, debe a parecer hoy por primera vez en público desde hace mes y medio para tomar posesión de su cargo y jurarlo sobre la Constitución en una ceremonia que se celebrará en el Kremlin y que dará pistas sobre su salud.La ceremonia, cuyo diseño ha, cambiado varias veces sobre la marcha, tal vez para ajustarla a las necesidades de la salud del presidente, durará media hora y tendrá lugar en el Palacio del Krenilin (el antiguo Palacio de Congresos del Kremlin), según los planes efectuados hasta ayer. El Palacio, del Kremlin es un edificio de corte funcional que contrasta con el resto del recinto y que fue construido en 1961 en época de Nikita Jruschov.

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El local tiene capacidad para 5.000 personas y ha sido el escenario de los congresos del Partido Comunista y también de las reuniones del superparlamento soviético en época de Mijaíl Gorbachov. Fue también el escenario donde Yeltsin anunció que abandonaba la militancia comunista.

La toma de posesión estaba prevista inicialmente al aire libre. El enfriamiento de las temperaturas y la posibilidad de lluvias fueron el primer argumento dado para justificar el traslado a un recinto cerrado. Fuentes de la organización citadas ayer por el periódico Izvestia señalaban de forma irónica que la ceremonia bajo techo permite ahorrar los 6.000 millones de rublos que se hubieran gastado para disolver las nubes sobre el Krenilin y los 1.500 millones de rublos que hubieran costado los fuegos artificiales.

El Palacio de Congresos permitirá a Yeltsin distanciarse de los asistentes, si así lo desea. Estos estarán muy atentos al número de pasos que da el presidente, a cómo entra y sale de la sala, al tiempo que dure su intervención y si entre las personas que le rodean figura su médico personal, el mismo que estaba detrás del líder el 3 de julio, cuando éste votó en el sanatorio de Borvija.

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