EXPOSICIONES - RECICLAJE DE DESECHOS

Un artista senegalés realiza sus obras con material de la basura

Las latas de atún pueden convertirse en sillas, relojes y molduras para cuadros. La "resurrección de la materia usada" es la base del trabajo del artista senegalés Moussa Salcho. Su pasión por el reciclaje viene de lejos. Como todos los niños de sui tierra, Sakho, nacido hace 47 años en la isla de Goreé, aprendió desde pequeño a construir juguetes con bidones, piezas de desguace y neumáticos. La falta de medios obligaba, y obliga, a agudizar el ingenio. Pero él, además, ha seguido ejerciendo de rescatador de desechos con fines artísticos. Su obra ha viajado por París y Costa de Marfil. Ahora l...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Las latas de atún pueden convertirse en sillas, relojes y molduras para cuadros. La "resurrección de la materia usada" es la base del trabajo del artista senegalés Moussa Salcho. Su pasión por el reciclaje viene de lejos. Como todos los niños de sui tierra, Sakho, nacido hace 47 años en la isla de Goreé, aprendió desde pequeño a construir juguetes con bidones, piezas de desguace y neumáticos. La falta de medios obligaba, y obliga, a agudizar el ingenio. Pero él, además, ha seguido ejerciendo de rescatador de desechos con fines artísticos. Su obra ha viajado por París y Costa de Marfil. Ahora llega a Madrid.

Las obras de Moussa Sakho recalan en la galería Bassari, cuyo objetivo es divulgar la vanguardia africana: dar a conocer la riqueza y la vida que bulle en un continente del que, a menudo, sólo trascienden las hambrunas y las guerras. Esta exposición, abierta hasta el 28 de junio bajo el título África recupera, es la primera de un proyecto que mostrará cada dos meses a un artista diferente.En la muestra hay fotografías, antiguas enmarcadas con restos de botes de refrescos y latas de conserva. El buen oficio de Sakho con los residuos se hizo popular gracias a los marcos que hizo para las telas estampadas en batik realizadas por dos de sus 16 hermanos. Las imágenes reflejan aspectos de la tradición senegalesa comentados con ironía: peinado que se pusieron de moda, lo ajuares de las bodas, personajes del mundo islámico, trovadores... La mujer es protagonista omnipresente. "Es la base de la humanidad", afirma.

También hay pinturas bajo cristal con motivos como la esclavitud, de la que Goreé fue un antiguo bastión. También temas menos duros, como el plato típico de Senegal o costumbres curiosas, como el uso de la boina vasca, que en los años cuarenta se puso de moda en Dakar.

En la exposición hay también muebles y relojes fabricados con botes de café instantáneo y de refrescos. Hay un neumático de camión convertido en mesa o un amortiguador de las furgonetas utilizadas en Senégal para el transporte de víajeros que hace las veces de taburete. Todas estas obras también se encuentran a la venta a precios que van desde las 10.000 hasta las 67.000 pesetas.

Sakho ha descubierto un filón. en Madrid, lleno de objetos interesantes que encuentra en los contenedores. De estas incursiones por el castizo mundo de los busqueros nació el indicador de madera que señala al viandante la exposición.

África recupera. Galería Bassari (Cristo, 3, metro Noviciado). Hasta el 28 de junio, de lunes a sábado, en horario de 11.00 a 14.00 y de 17.30 a 20.30. Entrada libre.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En