REPARTO DEL RECORTE FISCAL

Borrell considera que el reparto del ajuste es un gran fraude electoral

José Borrell, portavoz socialista en la Comisión de Presupuestos, arremetió duramente ayer contra el reparto del recorte presupuestario aprobado por el PP que se concentra, al igual que el ajuste de 117.000 millones que propuso el anterior Gobierno socialista a la oposición semanas antes de las elecciones del pasado mes de marzo, en una fuerte reducción de la inversión pública. "Emplazo al señor Rato a que nos explique por qué en vez de suprimir el famoso despilfarro socialista propina un recorte brutal a la inversión pública, que significa que se dejan de crear 20.000 empleos y que no ...

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José Borrell, portavoz socialista en la Comisión de Presupuestos, arremetió duramente ayer contra el reparto del recorte presupuestario aprobado por el PP que se concentra, al igual que el ajuste de 117.000 millones que propuso el anterior Gobierno socialista a la oposición semanas antes de las elecciones del pasado mes de marzo, en una fuerte reducción de la inversión pública. "Emplazo al señor Rato a que nos explique por qué en vez de suprimir el famoso despilfarro socialista propina un recorte brutal a la inversión pública, que significa que se dejan de crear 20.000 empleos y que no sólo no se contratará obra nueva sino que se tendrán que rescindir algunos de los contratos ya en construcción".Para el ex ministro de Obras Públicas y Transportes del último Gobierno socialista la distribución del citado ajuste es el primer fraude electoral del PP. Señaló que el nuevo Gobierno no ha sido capaz ni de acabar, con el supuesto despilfarro, ni de reducir los gastos corrientes de la Administración. Añadió que el recorte no es de 200.000 millones sino de 126.000 pues los 56.000 millones que dejarán de transferirse a la Unión Europea (había presupuestados 856.997 millones) así como los 18.000 millones menos que se aportarán a los entes territoriales son consecuencia de "la evolución de las variables económicas". "Eso no es un ajuste", insistió, "es algo que no se va a gastar diga lo que diga el Gobierno".

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Para Izquierda Unida el citado recorte de la inversión pública es una mala noticia. Su secretario de Economía, Salvador Jové, mostró su preocupación por el impacto que tendrá en el crecimiento, las infraestructuras y el equilibrio territorial la reducción de esta partida. Una preocupación que comparten los sindicatos UGT y CC OO. Este último criticó además que el recorte se divida de manera indiscriminada entre los ministerios "sin definir el tipo de programas afectados". Abogó por reducir el déficit público mediante el aumento de los ingresos fiscales y no el recorte de los gastos.

La crítica más dura provino de la Coordinadora de, Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) que calificó de "medida reaccionaria" el recorte de distintas partidas del Ministerio de Agricultura (por un total de 9.679 millones).

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