La plantilla del Grupo 16 presiona para salvar la crisis

Momento decisivo de cara al futuro de las publicaciones

Los empleados del Grupo 16 -en proceso de suspensión de pagos desde finales de 1995- han decidido incrementar la presión para encontrar una salida a la grave crisis que atraviesan esas empresas. Ayer se manifestaron ante los Ministerios de Trabajo y de Economía y Hacienda para reclamar ayudas oficiales que faciliten la supervivencia de las publicaciones. Además aprobaron celebrar un encierro indefinido en las instalaciones de Diario 16.El aumento de la presión responde a la idea, confirmada por fuentes próximas a los responsables de la gestión, de que el futuro del Grupo 16 se dilucidar...

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Los empleados del Grupo 16 -en proceso de suspensión de pagos desde finales de 1995- han decidido incrementar la presión para encontrar una salida a la grave crisis que atraviesan esas empresas. Ayer se manifestaron ante los Ministerios de Trabajo y de Economía y Hacienda para reclamar ayudas oficiales que faciliten la supervivencia de las publicaciones. Además aprobaron celebrar un encierro indefinido en las instalaciones de Diario 16.El aumento de la presión responde a la idea, confirmada por fuentes próximas a los responsables de la gestión, de que el futuro del Grupo 16 se dilucidará en las próximas horas. Las mismas fuentes aseguran que aún cabe la posibilidad de que fructifiquen algunas de las gestiones realizadas a título personal por el empresario José Cadena para encontrar nuevos inversores.

Diario 16, Cambio 16 y Motor 16 llevan meses en suspensión de pagos y, pese a las manifestaciones públicas, ninguno de los tres empresarios que se hicieron cargo de la gestión, José Luis Domínguez, José Cadena y Miguel Angel Jiménez, han realizado el desembolso de capital prometido: 1.500 millones de pesetas. Tampoco han llegado el préstamo solicitado al Instituto de Crédito Oficial por importe de 1.500 millones de pesetas, ni los avales de la Comunidad de Madrid por valor de otros 700 millones. La representación de los trabajadores, además de recabar información sobre las intenciones de los accionistas, ha tratado de gestionar contactos con el nuevo Gobierno de José María Aznar para desbloquear alguna posible solución y salir de la crisis.

Los trabajadores fueron recibidos ayer -en ausencia del ministro de Trabajo, Javier Arenas- por el secretario general de Empleo, Manuel Pimentel. Un portavoz de Trabajo explicó a EL PAÍS que el alto cargo que había recibido a la representación de la plantilla del Grupo 16 se limitó a "escuchar los argumentos de los trabajadores".

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