ENSEÑANZA DE LAS CIENCIAS: EXPERIENCIAS DIDÁCTICAS

Alumnos de COU de 39 distritos participan en la Olimpiada 96 de Física y Química

Un dato que, unido al número de participantes (107 en Física y 95 en Química), puede servir para aventurar que el grado de salud de la actividad científica en la España del siglo XXI es cuando menos esperanzador. Futurible más que acertado si tenemos en cuenta que estos casi doscientos estudiantes de COU resgistran los mejores expedientes académicos del país con una media de sobresaliente.El objetivo de estas Olimpiadas es, según sus organizadores, promover el estudio y la enseñanza de la Física y la Química, "además de fomentar la camaradería entre estudiantes de las distintas Comunida...

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Un dato que, unido al número de participantes (107 en Física y 95 en Química), puede servir para aventurar que el grado de salud de la actividad científica en la España del siglo XXI es cuando menos esperanzador. Futurible más que acertado si tenemos en cuenta que estos casi doscientos estudiantes de COU resgistran los mejores expedientes académicos del país con una media de sobresaliente.El objetivo de estas Olimpiadas es, según sus organizadores, promover el estudio y la enseñanza de la Física y la Química, "además de fomentar la camaradería entre estudiantes de las distintas Comunidades Autónomas", señala el presidente de la sección de Química, Juan Antonio Rodríguez Renuncio. A este aliciente se une el de los premios cuya cuantía asciende a 100.000 pesetas para los, nueve ganadores, 5 de Física y 4 de Química, y la participación en la Olimpiada Internacional que tendrá lugar el próximo mes de julio en Oslo (Física) y Moscú (Química).

Una cohorte de autocares trasladó a los participantes hasta la facultad de Física de la Complutense madrileña donde se dieron cita todos los distritos universitarios con los tres ganadores del certamen local. Cerebritos regionales capaces de resolver problemas, digerir fórmulas y despejar equis con solvencia tal que algunos profesores universitarios encargados de corregir las pruebas admiten su estupor ante algunos ejercicios. Christian Wagner es profesor de Física en la Universidad de Cádiz y acudió a la prueba acompañando a los tres alumnos finalistas de este distrito. En su opinión, la importancia de estas Olimpíadas radica en que se valora "por encima de todo, la creatividad de los alumnos ya que algunos de los problemas que deben resolver no han podido verlos en los temarios de bachillerato. Interesa saber cómo resuelven estas cuestiones porque en ciencia la creatividad es fundamental, mucho más que la memoria".

La relatividad

Los tres alumnos gaditanos escuchan atentos las explicaciones de Wagner mientras aguardan la salida hacia Navacerrada donde tendrán lugar las pruebas. Asienten respecto a la creatividad pero insisten en que los más complejo es lo más relativo: "Ya sabe, la teoría de la relatividad que es muy complicada", señalan al unísono.Los correctores de los ejercicios desconocen hasta minutos antes de que comience las pruebas el contenido de las mismas, como tampoco conocen, ni antes ni después, el nombre de los alumnos. Minutos antes de que comience la primera prueba, algunos optan por relajar las neuronas con una partida interregional de futbolín, "es una manera de hacer camaradería", apunta un grupo de profesores. Otros prefieren tomar el sol y sólo unos pocos apuran estos minutos previos para repasar alguna fórmula.

Ninguno de ellos acepta el calificativo de empollón que consideran "erróneo, despectivo y falso". "A mí me cuesta más estudiar filosofía que química", dice María Isabel García de Soria, "y no me considero una empollona por sacar matrícula, simplemente me gusta estudiar". Es ésta una opinión extendida entre los participantes; alguno, incluso, que al ser preguntado por las peores notas obtenidas a lo largo de los estudios señala, compungido, "un 8,5 en Historia".

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