"Terrible" situación de los derechos humanos en Nigeria, según la ONU

Una delegación de las Naciones Unidas calificó ayer de "terrible" el estado de los derechos humanos en Nigeria tras una estancia de 16 días para investigar la ejecución de nueve disidentes ogonis y la situación política bajo el régimen militar. "Tal como yo lo he visto, en este país el problema de los derechos humanos es terrible, y el panorama político aterrador", declaró ayer en Lagos Koffi Amega, el jefe de la misión.La misión fue enviada por el secretario general de la ONU, Butros Butros-Gali, para investigar las circunstancias en que que nueve opositores del Movimiento para la Supervivenc...

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Una delegación de las Naciones Unidas calificó ayer de "terrible" el estado de los derechos humanos en Nigeria tras una estancia de 16 días para investigar la ejecución de nueve disidentes ogonis y la situación política bajo el régimen militar. "Tal como yo lo he visto, en este país el problema de los derechos humanos es terrible, y el panorama político aterrador", declaró ayer en Lagos Koffi Amega, el jefe de la misión.La misión fue enviada por el secretario general de la ONU, Butros Butros-Gali, para investigar las circunstancias en que que nueve opositores del Movimiento para la Supervivencia del Pueblo Ogoni (MOSOP, en sus siglas en inglés), entre ellos el escritor Ken Saro Wiwa, fueron ejecutados el pasado 10 de octubre en Port Harcourt, al sur de Nigeria, y estudiar la promesa del dictador Sani Abacha de restablecer la democracia en el país más poblado de África (cerca de 120 millones de habitantes) en 1998. La ejecución se llevó a cabo pese al alud de protestas internacionales y tras un juicio que organizaciones de defensa de los derechos humanos tacharon de farsa.

La comisión de la ONU visitó la tierra de los ogonis, una etnia formada por unas 500.000 personas que habita en el delta del río Níger, degradado por la explotación petrolífera de la compañía angloholandesa Shell. En Port Harcourt, la delegación hizo un emotivo llamamiento en favor de los ogonis que se manifestaron durante su estancia contra las detenciones y las intimidaciones de las fuerzas de seguridad. Los enviados de Butros-Gali se entrevistaron con los abogados que defendieron a Saro Wiwa y a sus compañeros, hoy encarcelados.

En su periplo por las prisiones del régimen militar, la delegación sostuvo un encuentro con Moshood Abiola, el presunto vencedor de las anuladas elecciones de 1993, encarcelado desde junio de 1994 y acusado de traición por haberse proclamado presidente de Nigeria sobre la base de los votos escrutados. Abiola pidió a la delegación de las Naciones Unidas que le ayudara a lograr su libertad.

La Asociación de Médicos de Nigeria (NMA, en sus siglas en inglés) espera poder entregar directamente a la misión internacional un informe sobre el estado de salud "inquietante" de numerosos detenidos políticos, entre ellos el exdirector del NMA, el doctor Beko Ransome-Kuti.

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