Reclamación

Quiero denunciar el funcionamiento del albergue de la Comunidad de Madrid de Los Batanes-Rascafría (recientemente privatizado, como todos), dado que en el mismo, según me indicó su director, no existe ni hoja de reclamaciones ni buzón de sugerencias.El pasado 16 de febrero acudimos 23 personas a pasar el fin de semana, para lo que fue necesario efectuar una reserva con un mes de antelación. Finalmente, cuatro de ellas no pudieron acudir, hecho que comunicamos en la recepción nada más llegar.

Sin embargo, al abonar la factura comprobamos que se habían incluido todas las plazas reservadas...

Quiero denunciar el funcionamiento del albergue de la Comunidad de Madrid de Los Batanes-Rascafría (recientemente privatizado, como todos), dado que en el mismo, según me indicó su director, no existe ni hoja de reclamaciones ni buzón de sugerencias.El pasado 16 de febrero acudimos 23 personas a pasar el fin de semana, para lo que fue necesario efectuar una reserva con un mes de antelación. Finalmente, cuatro de ellas no pudieron acudir, hecho que comunicamos en la recepción nada más llegar.

Sin embargo, al abonar la factura comprobamos que se habían incluido todas las plazas reservadas. El director nos aclaró que en las condiciones de utilización de los albergues se indica que la facturación se hará por el número de plazas y servicios reservados", argumentando que, debido al carácter social del albergue y dado que está prácticamente completo todos los fines de semana, esta medida disciplinaba a la gente y evitaba un uso indebido del mismo. Nada que objetar.

Ahora bien, al preguntarle si el albergue disponía de nuestras plazas no cubiertas ante eventuales solicitudes (de esta forma alguien podría beneficiarse de ellas y nosotros recuperar parte, o todo, de nuestro dinero, sin ningún coste para el albergue), la respuesta fue. negativa; a pesar de reconocer que la situación se repite con cierta frecuencia. Supongo que ésta será una de las consecuencias de la eficacia de las privatizaciones: una vez garantizados los máximos ingresos posibles, da igual el carácter social del albergue, tantas veces citado, sin embargo, por el director.-