Bélgica: el oro de Bosman

Lamentablemente para los habitantes del lugar, las emociones futbolísticas de los próximos meses se :reducen en Bélgica a la cosa local, aunque no está exenta de pasiones internacionales. Los Diablos Rojos, que tantas picas de Flandes han llegado a clavar en la furia española, han sido eliminados de la Eurocopa por España y Dinamarca. El Anderlecht se empachó con el Ferencvaros el verano pasado y se quedó sin Liga de Campeones. Al Brujas lo echó el Zaragoza en la Recopa. No hay restos de fútbol belga en la Copa de la UEFA desde hace meses.De momento (20 jornadas) el líder de la Liga es el Bruj...

Lamentablemente para los habitantes del lugar, las emociones futbolísticas de los próximos meses se :reducen en Bélgica a la cosa local, aunque no está exenta de pasiones internacionales. Los Diablos Rojos, que tantas picas de Flandes han llegado a clavar en la furia española, han sido eliminados de la Eurocopa por España y Dinamarca. El Anderlecht se empachó con el Ferencvaros el verano pasado y se quedó sin Liga de Campeones. Al Brujas lo echó el Zaragoza en la Recopa. No hay restos de fútbol belga en la Copa de la UEFA desde hace meses.De momento (20 jornadas) el líder de la Liga es el Brujas (el Barça local: más popular que palmarés). Es el equipo por esencia de los flamencos, empezando por el orondo primer ministro Jean-Luc Dehaene, que vuela a donde sea para seguir a su equipo. Campeón de Liga en 1990 y 1992, el año pasado quedó tercero pero ganó la Copa de Bélgica.

A dos puntos está el Anderlecht -digamos que el Real Madrid: el equipo de la capital, el más laureado, el más conocido fuera del país...- que ha remontado después de un comienzo catastrófico que le costó el cargo al entrenador en cuatro días. El sustituto, una vez más, fue Raymond Goethals (como quien dice, Luis Molowny).El otro grande, el Standard de Lieja, subcampeón el año pasado, histórico representante de la parte francófona del país, vive un año catastrófico. Su portero Gilbert Bodart, llamado el año pasado a suceder al mítico Michel Preudhomme, era el gran favorito para obtener esta misma semana la codiciada Bota de Oro que premia el mejor jugador belga. La mala temporada que vive le ha hecho perder los nervios al ver cómo crecía su rival de la competencia, el australiano del Brujas Paul Okon. "Hay una conspiración de los flamencos contra el Standard", ha llegado a decir. Ante semejante guerra, el semanario Télé Mousquite (el Teleprograma belga), ha propuesto que le den la Bota de Oro a Jean Marc Bosman. Éste ha rechazado la bota derecha ("ésa es para los que juegan") pero ha reclamado la izquierda ("me la merezco después; de lo que he hecho por los futbolistas").