El secuestro de Aldaya es desde hoy el segundo más largo de ETA

El secuestro del industrial guipuzcoano José María Aldaya es desde hoy el segundo más largo de la historia de extorsiones de ETA, después del de Emiliano Revilla. Aldaya cumplió ayer 117 días privado de libertad, los mismos que Julio Iglesias Zamora, mientras que Revilla permaneció secuestrado 249.

Los trabajadores de Alditrans, propiedad de Aldaya, se concentraron ayer por la mañana en los jardines Alderdi Eder, situados en el centro de San Sebastián, y por la noche, a las 22 se celebró una concentración popular con velas y canciones en Irún. En este último acto cada asistente port...

El secuestro del industrial guipuzcoano José María Aldaya es desde hoy el segundo más largo de la historia de extorsiones de ETA, después del de Emiliano Revilla. Aldaya cumplió ayer 117 días privado de libertad, los mismos que Julio Iglesias Zamora, mientras que Revilla permaneció secuestrado 249.

Los trabajadores de Alditrans, propiedad de Aldaya, se concentraron ayer por la mañana en los jardines Alderdi Eder, situados en el centro de San Sebastián, y por la noche, a las 22 se celebró una concentración popular con velas y canciones en Irún. En este último acto cada asistente portó una vela "como símbolo de iluminación de las mentes de nuestro pueblo hacia la tolerancia y el respeto democrático".

En la manifestación de los trabajadores de Alditrans participaron dos de los hijos del transportista y el coordinador de Izquierda Unida Javier Madrazo. "La violencia y este mismo secuestro son un obstáculo importante a la salida dialogada que está reclamando la mayoría del pueblo vasco", declaró Madrazo.

El dirigente de IU resaltó que con el secuestro "ETA busca financiar la estrategia de la violencia", y pidió a la banda terrorista que "se dé cuenta de que hoy la sociedad", está demandando una salida consensuada al conflicto vasco, y para ello es necesario generar las condiciones de distensión que posibiliten un diálogo eficaz".

En el acto, los trabajadores de Alditrans desplegaron, como cada sábado, una pancarta con el lema "Todos somos José Mari".