Nada en contra

Los inversores se encontraron ayer con que habían tomado posiciones en el mercado para no quedarse fuera de un posible movimiento alcista, y con un entorno enrarecido en el que las realizaciones de beneficios eran la norma. En el mercado español había muy poco que realizar, lo que permitió una sesión tranquila que contrastaba con los altibajos del mercado de deuda, el en que el precio del futuro ofrecía un punto de diferencia entre los valores máximo y mínimo del día. En el mercado secundario, tras las ganancias iniciales las rentabilidades volvieron al nivel del día anterior.La apertura de Nu...

Los inversores se encontraron ayer con que habían tomado posiciones en el mercado para no quedarse fuera de un posible movimiento alcista, y con un entorno enrarecido en el que las realizaciones de beneficios eran la norma. En el mercado español había muy poco que realizar, lo que permitió una sesión tranquila que contrastaba con los altibajos del mercado de deuda, el en que el precio del futuro ofrecía un punto de diferencia entre los valores máximo y mínimo del día. En el mercado secundario, tras las ganancias iniciales las rentabilidades volvieron al nivel del día anterior.La apertura de Nueva York, con ligeros recortes, no fue un obstáculo para que se reanudaran las tomas de posiciones en la Bolsa española, con la única posible explicación a posteriori del resultado del Consejo de Ministros, en el que no se tomó decisión alguna que pudiera afectar al mercado.La contratación de esta sesión fue de 25.390 millones de pesetas efectivas, muy concentrada en los valores del Ibex 35 y apoyada en un par de aplicaciones, que aportaron 1.600 millones de pesetas al total. Al cierre, Madrid ganó un 0,59% y el Ibex 35 un 0,72%, mientras que en el exterior todo eran recortes.