Cartas al director

Botín y las pensiones

El presidente del Banco Santander ha realizado dos comentarios de gran calado político y social que no deben quedar fuera del debate de la sociedad. Es más, dicho debate debe centrarse en estos y otros puntos similares y no sobre cuestiones que están ya en manos de la justicia. Las dos afirmaciones son:

a) "Hay que reformar el sistema público de pensiones". Que los españoles decidan si quieren un sistema público o privado. Según él, sería mejor desmantelar el sistema público (aunque ahora es inviable, recalcó), es decir, que en el futuro tiene esperanzas de desmantelarlo.

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El presidente del Banco Santander ha realizado dos comentarios de gran calado político y social que no deben quedar fuera del debate de la sociedad. Es más, dicho debate debe centrarse en estos y otros puntos similares y no sobre cuestiones que están ya en manos de la justicia. Las dos afirmaciones son:

a) "Hay que reformar el sistema público de pensiones". Que los españoles decidan si quieren un sistema público o privado. Según él, sería mejor desmantelar el sistema público (aunque ahora es inviable, recalcó), es decir, que en el futuro tiene esperanzas de desmantelarlo.

Esta afirmación representa que el capitalismo duro, el puro, detesta el Estado de bienestar. Cuando el Partido Socialista Obrero Español tenía mayoría absoluta, los banqueros no se atrevían a hacer estas afirmaciones; ahora que él cree que pronto ganará la derecha, saca pecho y prepara el terreno para apropiarse de grandes cantidades de dinero con el mercado de las pensiones. Apartado que hasta ahora ha quedado fuera, al menos en su núcleo central, del sector privado.

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b) "Me gusta el programa económico del Partido Popular"', dijo el señor Botín. Esta afirmación o comentario, unido al anterior, significa que él tiene esperanzas fundadas en que el Partido Popular sea el instrumento para reformar el sistema público de pensiones. Por tanto, ahora les apoya porque debe tener fundados motivos para pensar que luego dicha reforma se realizará. Y si es así, el Partido Popular está engañando a los españoles cuando recalca que no se debe tener miedo al cambio en este aspecto cuando ellos gobiernen; espero que nunca lo hagan, dicho sea de paso.

Por tanto, el señor Botín, en un alarde de "chulería", se atreve a decir qué partido le convierte que gobierne. Es normal que los banqueros apoyen a la derecha pura y dura y el PP lo es. Pero eso antes lo hacían en comidas o cenas entre amigos, pero no en la Junta General de Accionistas, o en una rueda de prensa posterior. Esas afirmaciones, aunque a él le pesen, no hacen daño al PSOE; al contrario, le dan fuerza, ya que muchos ciudadanos le considerarnos único garante del sistema de bienestar social que tenernos. Yo soy mucho más comedido que el señor Botín y, desde luego, no voy a pedir que los ciudadanos que consideren el Estado de bienestar como algo que no se debe tocar retiren sus fondos de sus bancos, aunque algunos lo consideren justo, pues al que ataca nuestro bienestar no se le debe fomentar el suyo.-

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