Un convoy de la ONU con comida y combustible logra llegar a Srebrenica

Las tropas serbobosnias permitieron ayer el paso de un convoy de la ONU al sitiado enclave de Srebrenica. El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los refugiados anunció en Sarajevo que el convoy transporta 96 toneladas de alimentos y combustible a los desesperados habitantes de este enclave musulmán situado al oriente de Bosnia. "Es el primer combustible que llega a Srebrenica en seis meses", dijo su portavoz, Kris Janowski, quien se felicitó del "primer indicio esperanzador que tenemos por parte serbia desde hace muchas semanas".Naciones Unidas había precisado anteriormente que la situaci...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Las tropas serbobosnias permitieron ayer el paso de un convoy de la ONU al sitiado enclave de Srebrenica. El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los refugiados anunció en Sarajevo que el convoy transporta 96 toneladas de alimentos y combustible a los desesperados habitantes de este enclave musulmán situado al oriente de Bosnia. "Es el primer combustible que llega a Srebrenica en seis meses", dijo su portavoz, Kris Janowski, quien se felicitó del "primer indicio esperanzador que tenemos por parte serbia desde hace muchas semanas".Naciones Unidas había precisado anteriormente que la situación humanitaria en todos los enclaves de Bosnia oriental sitiados por los serbios era muy preocupante y que sus habitantes se peleaban por conseguir comida.

El presidente bosnio, Alia Izetbegovic, pidió ayer en Ginebra apoyo político, militar, económico y humanitario a los países de la Organización de la Conferencia Islámica (OCI) y criticó a la comunidad internacional por su "decreciente" papel en la República exyugoslava, y a las fuerzas de la ONU por trabajar "según el dictado de algunos gobiernos, como el británico o el francés". Izetbegovic señaló que los países islámicos han prometido enviar tropas "para compensar la posible retirada" de cascos azules europeos.

Los ministros de Asuntos Exteriores islámicos pidieron un papel "más decidido" de las fuerzas de la ONU y reiteraron que las fronteras de Bosnia-Herzegovina no pueden ser modificadas y que los serbobosnios deben aceptar el plan de partición del grupo de contacto, que concede el 51% del territorio a la federación bosniocroata y el 49% a los serbios.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Archivado En