BilI Clinton marca distancias con el Gobierno de Silvio Berlusconi

Roma le aportó a BilI Clinton un tono bíblico en su discurso. "Por sus obras les juzgaremos" dijo al referirse a la presencia de ministros neofascistas en el Gabinete de Silvio Berlusconi. El presidente estadounidense, que revivió, treinta años después, la iniciativa de John Kennedy de dirigirse al pueblo italiano desde la plaza del Campidoglio, marcó una prudente distancia con el nuevo Gobierno italiano y advirtió que "todo el mundo es vulnerable" al fenómeno político que se ha producido recientemente en este país.

"Ningún país es inmune a que haya gente que llega a las elecciones con ...

Roma le aportó a BilI Clinton un tono bíblico en su discurso. "Por sus obras les juzgaremos" dijo al referirse a la presencia de ministros neofascistas en el Gabinete de Silvio Berlusconi. El presidente estadounidense, que revivió, treinta años después, la iniciativa de John Kennedy de dirigirse al pueblo italiano desde la plaza del Campidoglio, marcó una prudente distancia con el nuevo Gobierno italiano y advirtió que "todo el mundo es vulnerable" al fenómeno político que se ha producido recientemente en este país.

"Ningún país es inmune a que haya gente que llega a las elecciones con declaraciones extremistas que tratan de dividir al pueblo, tratando de aprovecharse de las frustraciones económicas, sociales y morales. En todos los países la población aspira a un cierto sentido de orden y disciplina, y cuando esas condiciones se ven en peligro todos los sistemas políticos son vulnerables a la gente que trata de aprovecharse del miedo y dividir al pueblo", declaró el presidente norteamericano en una conferencia de prensa conjunta con BerlusconiBill Clinton, cuyos orígenes políticos están en la izquierda del Partido Demócrata, fue más allá de lo que cabía esperarse en su valoración del Gobierno italiano. Reconoció que no es justo descartar de antemano a ninguna fuerza política por su trayectoria pasada, pero en lugar de aceptar sin comentarios los resultados de las elecciones que llevaron al poder a una coalición de la derecha y la extrema derecha se limitó a concederle al nuevo Gabinete el beneficio de la duda. Clinton no tuvo inconveniente en compartir cubierto con el líder neofascista Gianfranco Fini en la cena de gala ofrecida anoche en su honor.

El presidente Clinton manifestó que Berlusconi le había asegurado que su Gabinete estaba "de arriba a abajo comprometido inequívocamente con la democracia", pero él insistió en que "la única manera útil y razonable de juzgar a los Gobiernos hoy es por lo que hacen cuando están en el poder".

Democracia es el tema central de esta gira europea que el presidente Clinton inició ayer en Italia y que continuará en el Reino Unido y Francia para conmemorar, el próximo día 6, la invasión de Normandía.

"Durante 50 años hemos estado juntos", manifestó el presidente estadounidense, "para construir la paz y la prosperidad en Europa Occidental. Extendamos ahora ese compromiso hacia una Europa más amplia. De manera que todos podamos ser recordados dentro de 50 años como los constructores de la paz".