La huelga provoca retrasos de 20 minutos en los cercanías

La tercera jornada de la huelga de los trabajadores de Renfe provocó ayer retrasos de hasta 45 minutos en los trenes de cercanías. Desde las 6.30 a las 8.30, los piquetes intentaron impedir la salida puntual de los trenes accionando los frenos, y en parte lo consiguieron. También se manipularon las señales de tráfico ferroviario.El paro se sucedió con relativa normalidad, según Renfe, y se cumplieron los servicios mínimos del 75% fijados por la compañía, que calculó que sólo el 18% de la plantilla secundó la huelga convocada por CC OO y la CGT.

En Villaverde Alto y Villaverde Bajo, los ...

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La tercera jornada de la huelga de los trabajadores de Renfe provocó ayer retrasos de hasta 45 minutos en los trenes de cercanías. Desde las 6.30 a las 8.30, los piquetes intentaron impedir la salida puntual de los trenes accionando los frenos, y en parte lo consiguieron. También se manipularon las señales de tráfico ferroviario.El paro se sucedió con relativa normalidad, según Renfe, y se cumplieron los servicios mínimos del 75% fijados por la compañía, que calculó que sólo el 18% de la plantilla secundó la huelga convocada por CC OO y la CGT.

En Villaverde Alto y Villaverde Bajo, los huelguistas accionaron los frenos de los vagones, lo que provocó retrasos de unos 20 minutos, según la compañía ferroviaria. En la estación de Chamartín se provocaron retrasos de hasta 45 minutos en algunas líneas, que estuvieron cortadas con traviesas colocadas por los huelguistas en las vías.

A las 18.30 comenzó la segunda jornada del paro de dos horas, que transcurrió con absoluta normalidad. Sólo una anécdota: el maquinista del Talgo Alicante-Chamartín decidió secundar la huelga y a las 18.30 paró las máquinas. Los viajeros fueron, transportados desde Ciempozuelos a Madrid en un cercanías.

La huelga, convocada para todos los lunes, miércoles y viernes de abril, ha costado ya cuatro expedientes sancionadores a otros tantos -trabajadores de la compañía -"líderes sindicales", según Renfe- por haber cometido actos de sabotaje contra el normal funcionamiento de los servicios mínimos. Dos de los expedientados fueron denunciados por alteración del orden público en la estación de Atocha.

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