La cumbre de la CEI respalda el papel del Ejército ruso como garante de la seguridad

La cumbre de la Comunidad de Estados Independientes (CEI) finalizó ayer en Moscú, con la firma de casi una veintena de documentos que, según opinión de los observadores, tendrán pocas o nulas consecuencias. Si ha habido un triunfo, éste ha sido para los militares rusos, que se reafirmaron en el papel de guardianes de las fronteras de la CEI y como pacificadores en los conflictos en el antiguo imperio soviético.Formalmente el éxito de la cumbre de Moscú ha sido rotundo: se firmaron 17 documentos, Ucrania ingresó como miembro asociado en la Unión Económica y Moldavia fue aceptada definitivamente...

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La cumbre de la Comunidad de Estados Independientes (CEI) finalizó ayer en Moscú, con la firma de casi una veintena de documentos que, según opinión de los observadores, tendrán pocas o nulas consecuencias. Si ha habido un triunfo, éste ha sido para los militares rusos, que se reafirmaron en el papel de guardianes de las fronteras de la CEI y como pacificadores en los conflictos en el antiguo imperio soviético.Formalmente el éxito de la cumbre de Moscú ha sido rotundo: se firmaron 17 documentos, Ucrania ingresó como miembro asociado en la Unión Económica y Moldavia fue aceptada definitivamente en la CEI, con lo que todas las repúblicas que integraban la desaparecida URSS están en la organización, a excepción de los tres países bálticos.

Sin embargo, tras estos éxitos formales hay, como ya es costumbre, sólo papeles y palabras. Así lo demuestran las declaraciones de los participantes en la cumbre, en especial la de Viacheslav Kébich, el primer ministro de Bielorrusia. "La Unión Económica no funcionaba y ahora tampoco lo hará", dijo Kébich, desilusionado, al terminar la reunión. El problema, según el dirigente bielorruso, es que en lugar de crear un Comité Económico Intergubernamental con facultades concretas, se ha formado un comisión "amorfa", que sólo tiene funciones consultivas. La crítica de Bielorrusia es especialmente significativa si se toma en cuenta que este país, en vísperas de la cumbre de Moscú, firmó la unión de su moneda con el rublo.

El gran ausente

El gran ausente de la cumbre ha sido el presidente de Kazajstán, Nursultán Nazarbáyev -oficialmente por motivos de salud-, quien ha dicho abiertamente que la CEI no tiene futuro y que es necesario crear una Unión Euroasiática.El líder azerbaiyano, Heydar Alíyev, declaró, por su parte, que "la indiferencia ante el hecho de que un miembro de la CEI [Armenia] agrede abiertamente a otro miembro de la CEI [Azerbaiyán] cierra prácticamente las perspectivas de formar una organización internacional viable".

La cumbre emitió una declaración sobre el Alto Karabai, que propone desplegar tropas de interposición entre las fuerzas armenias y azerbaiyanas. Rusia, mientras tanto, ha propuesto un plan que contempla el alto el fuego, la separación de las partes en conflicto y la creación de una zona de control con observadores internacionales.

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