18 jóvenes atendidos por intoxicación etílica en Cuenca
Los más jóvenes están aprovechando las vacaciones escolares para iniciarse en el consumo de alcohol. En Cuenca, 18 jóvenes fueron atendidos por intoxicación etílica tras la célebre procesión de Las Turbas en la noche del jueves y la madrugada del Viernes Santo. En Madrid, 17 menores fueron sorprendidos cuando bebían en tres establecimientos que ya han sido denunciados.
La conocida como procesión de los borrachos terminó además con tres policías heridos, al cargar las fuerzas del orden público contra un grupo de unos 35 jóvenes que arrojaron contenedores de basura en una calle...
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Los más jóvenes están aprovechando las vacaciones escolares para iniciarse en el consumo de alcohol. En Cuenca, 18 jóvenes fueron atendidos por intoxicación etílica tras la célebre procesión de Las Turbas en la noche del jueves y la madrugada del Viernes Santo. En Madrid, 17 menores fueron sorprendidos cuando bebían en tres establecimientos que ya han sido denunciados.
La conocida como procesión de los borrachos terminó además con tres policías heridos, al cargar las fuerzas del orden público contra un grupo de unos 35 jóvenes que arrojaron contenedores de basura en una calle para impedir el trabajo de los equipos municipales de limpieza y del cuerpo de bomberos en la plaza Mayor conquense.
La Policía de Cuenca ha identificado en las últimas horas a unos 315 jóvenes presuntamente implicados en los disturbios y ha controlado 38 vehículos. Ayudados por 43 miembros de la Intervención Policial de Madrid, se han incautado de unas 30 armas blancas, cadenas y objetos contundentes, y pequeñas cantidades de droga. Un total de 18 jóvenes necesitaron asistencia hospitalaria por intoxicación etílica o por caídas.
En Madrid, 17 jóvenes menores de 16 años fueron sorprendidos el viernes cuando consumían bebidas alcohólicas en tres establecimientos de Madrid, según informó ayer un portavoz de la Policía Municipal. Los tres establecimientos, han sido denunciados por la Policía Municipal.
200 casos
Con éstos, ya son más de 200 los menores descubiertos bebiendo alcohol en lo que va de año, tanto en bares como en discotecas madrileñas. Recientemente, la discoteca Bocaccio, situada en la calle del Marqués de la Ensenada, fue denunciada por vender alcohol a 10 chavales de menos de 15 años, tras una inspección efectuada por efectivos de la Policía Municipal. Por su parte, la Junta de Castilla y León mostró ayer su preocupación por el aumento del consumo de alcohol entre los jóvenes y entre los adolescentes, por lo que es partidaria de incrementar la vigilancia en los establecimientos para que no se sirvan bebidas alcohólicas a menores de 16 años.
El secretario general de la Consejería de Sanidad y Bienestar Social, José Luis Useros, lamentó en declaraciones a Efe hechos como el ocurrido hace escasos días en Ponferrada (León), donde siete chicas de entre 13 y 14 años tuvieron que ser hospitalizadas con síntomas de intoxicación producida por el consumo de alcohol, y algunas de ellas padecieron un "coma etílico".
Useros abogó por una mayor coordinación entre las administraciones y un incremento de la vigilancia policial en los locales para evitar que se venda alcohol a los menores.
Para el secretario general, junto a las campañas educativas contra el consumo de alcohol, también son necesarias "medidas coercitivas" que dificulten a los jóvenes el acceso al alcohol.