Intervención a PSV

Ha pasado ya un tiempo prudencial desde la intervención gubernamental de PSV y aún seguimos considerando que fue una decisión positiva, ya que se necesitaba de un gesto político de tal naturaleza para dar tranquilidad a los afectados y otorgar confianza al proyecto.No obstante, nuestra impresión es que aquella decisión llegó demasiado tarde y por su alcance resulta insuficiente.

Hoy día siguen sin despejarse las dudas más importantes: determinación de la fecha de inicio o de reinicio de la construcción y concreción de los requisitos y condiciones que deben cumplir los cooperativistas....

Ha pasado ya un tiempo prudencial desde la intervención gubernamental de PSV y aún seguimos considerando que fue una decisión positiva, ya que se necesitaba de un gesto político de tal naturaleza para dar tranquilidad a los afectados y otorgar confianza al proyecto.No obstante, nuestra impresión es que aquella decisión llegó demasiado tarde y por su alcance resulta insuficiente.

Hoy día siguen sin despejarse las dudas más importantes: determinación de la fecha de inicio o de reinicio de la construcción y concreción de los requisitos y condiciones que deben cumplir los cooperativistas.

De nada ha servido que en su momento se sustituyera al presidente de IGS o que UGT asumiera la totalidad del capital de esta empresa gestora, en el verano del pasado año. Ignoramos qué actuaciones ha desarrollado el nuevo equipo de IGS para dar salida a los problemas de la cooperativa PSV.

Sigue sin darse respuesta a nuestras preguntas a pesar de la solicitud de suspensión de pagos de PSV y de IGS planteada a finales del pasado mes de diciembre.

No se ha producido modificación importante alguna tras la intervención administrativa decretada en febrero.

Se ha concluido la auditoría de las cuentas de aquellas entidades y continuamos sin un plan de viabilidad para el conjunto de PSV y para cada promoción en particular.

Los cooperativistas en general, y esta asociación en particular, han dado muestras más que suficientes de su espíritu de colaboración y de receptividad a las propuestas que pudieran formularse para dar salida a la crisis.

Al margen de las actuaciones protagonizadas por un grupo de afectados, censuradas por la mayoría de los cooperativistas, suponemos que nadie podrá tener duda acerca de la paciencia que estamos acreditando.

Desde hace tiempo se está asistiendo a un cruce de acusaciones entre las entidades y organismos que tienen o han tenido alguna responsabilidad sobre IGS y PSV. Nuestra pregunta es cuándo va a terminar esta inútil polémica y van a reconducir sus esfuerzos en la búsqueda de soluciones.

Esperemos que sea muy pronto. Cada vez hay menos razones para tanta pasividad y dilaciones.-