La policía de Bilbao detiene a casi un centenar de chinos en cuatro meses

La Brigada de Documentación de la policía de Bilbao ha declarado la guerra a la inmigración ilegal de chinos. En poco más de cuatro meses, efectivos de este cuerpo han detenido en seis operaciones a 88 chinos ilegales y a 19 personas vinculadas al negocio de la inmigración laboral fraudulenta. Responsables de esta brigada policial intentan demostrar ante los jueces que de los restaurantes de comida china que proliferan en Vizcaya sirven de tapadera a este negocio."Lo cierto es que, en casi todas las operaciones, hemos encontrado en estos locales o en sus alrededores súbditos chinos que están i...

La Brigada de Documentación de la policía de Bilbao ha declarado la guerra a la inmigración ilegal de chinos. En poco más de cuatro meses, efectivos de este cuerpo han detenido en seis operaciones a 88 chinos ilegales y a 19 personas vinculadas al negocio de la inmigración laboral fraudulenta. Responsables de esta brigada policial intentan demostrar ante los jueces que de los restaurantes de comida china que proliferan en Vizcaya sirven de tapadera a este negocio."Lo cierto es que, en casi todas las operaciones, hemos encontrado en estos locales o en sus alrededores súbditos chinos que están indocumentados, sin permiso laboral y trabajando en régimen de semiesclavitud sólo por la comida y la cama", indican responsables policiales. En dos años escasos se ha pasado de 21 restaurantes de comida oriental a 49 en Vizcaya. La colonia legal de inmigrantes chinos sobrepasa los 700 en Euskadi, de los que 470 están radicados en Vizcaya.

La operación de la semana pasada en la localidad vizcaína de Barakaldo y la detención de 27 chinos el 21 de enero en Bilbao son las dos últimas redadas contra el negocio de inmigración ilegal teñido de amarillo que comenzaron en octubre. En Barakaldo fueron detenidas 18 personas y se desmantelaron dos talleres clandestinos de artesanía y material textil "cuyos productos, presumiblemente, iban destinados a los restaurantes chinos". Seis de los detenidos han sido acusados de un presunto delito de inmigración laboral fraudulenta.

Anuncios engañosos

El calvario de los inmigrantes ilegales orientales empieza ya cuando se dejan seducir por anuncios en los que se les promete "un trabajo digno, legal, estable y bien remunerado". "Mi primer contacto con la red lo hice en Pekín y tuve que pagar millón y medio de pesetas", indica en su declaración uno de los detenidos. A partir de ahí y según la tarifa elegida, el ciudadano comienza un viaje por tierra o por avión que le lleva hasta Moscú y diversos países ex comunistas hasta recalar en Francia y posteriormente introducirse en España.

"Muchos tienen que venderlo todo para conseguir la documentación y el pasaje y dejan como rehenes a sus familiares". El precio del billete y del, pasaporte oscila entre el medio millón y los tres millones de pesetas. La mayoría de ellos se queda sin documentación poco antes de llegar a su destino final, según sus declaraciones ante la policía.

Estos son algunos de los datos que han podido salir a la luz tras las detenciones efectuadas por la Brigada de Documentación bilbaína. El juramento de" silencio al que se ven obligados los inmigrantes y la dificultad idiomática -en China hay, 15 dialectos- han limitado las averiguaciones policiales. La policía cree que la eclosión de restaurantes chinos está relacionada con el negocio de la inmigración ilegal y el blanqueo de dinero. "Hemos tenido un caso de un camarero que ganaba menos de 90.000 pesetas y en dos años y medio se había comprado un casa de más de 14 millones y tenía un restaurante a su nombre. ¿Cómo es posible que en plena crisis se abran tantos restaurantes?. Hay algo que no cuadra, pero cerrar el círculo y demostrarlo ante el juez es más difícil. Además esto no es extendible a toda la colonia china", aclaran responsables de la Brigada. Lo cierto es que los inmigrantes ilegales son los que peor lo tienen, ya que la detención es el primer peldaño para su expulsión definitiva. De los 88 ilegales detertidos en estos meses sólo han sido expulsados seis.