Escepticismo de España ante el diálogo en Argelia
François Mitterrand no se anduvo ayer por las ramas. El presidente del la República Francesa aseguró que la situación actual en Argelina es de "guerra civil" entre el Gobierno y los islamistas. Acto seguido, el presidente del Gobierno español, Felipe González, confirmó que el intercambio de informaciones y de análisis sobre la violenta crisis de Argelia ocupó buena parte de las conversaciones que mantuvieron los dirigentes de ambos países en Toledo y Madrid. Unos y otros intentaron buscar una vía por la que poder "ayudar ( ... ) sin injerirse en sus asuntos internos".
González asegu...
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François Mitterrand no se anduvo ayer por las ramas. El presidente del la República Francesa aseguró que la situación actual en Argelina es de "guerra civil" entre el Gobierno y los islamistas. Acto seguido, el presidente del Gobierno español, Felipe González, confirmó que el intercambio de informaciones y de análisis sobre la violenta crisis de Argelia ocupó buena parte de las conversaciones que mantuvieron los dirigentes de ambos países en Toledo y Madrid. Unos y otros intentaron buscar una vía por la que poder "ayudar ( ... ) sin injerirse en sus asuntos internos".
González aseguró que está informado de que está en marcha "un intento de negociación" entre el Gobierno argelino y algunos líderes del movimiento islamista "que pacifique definitivamente el país".
Bastante evidente
El jefe del Ejecutivo español añadió: "Es bastante evidente que no parece que se estén dando las condiciones para que ese esfuerzo de diálogo interno de resultados en estos 'rnomentos". Felipe González "alentó", no obstante, a las autoridades argelinas a seguir explorando la vía del diálogo que el Frente Islámico de Salvación (FIS) rechazó el pasado domingo en un comunicado emitido desde el interior de Argelia.François Miterrand, en cuyo país acaba de producirse una gran redada de militantes y simpatizantes del Frente Islamico de Salvacion, había precisado: "Hay un Gobierno argelino con el que tenemos relaciones que pensamos mantener. Nos esforzamos por no dar ninguna baza particular a la revuelta contra las instituciones".