Mueren 43 ballenas varadas en una playa

Al menos 43 ballenas piloto, de las más de 200 que quedaron varadas el lunes y el martes en dos playas de Farewell Spit (una península en la isla del Sur, Nueva Zelanda), murieron ayer, a pesar de los esfuerzos de los equipos de rescate por mantenerlas vivas. Perecieron agotadas, aplastadas y deshidratadas, según contó Kay Stark, coordinador del equipo de rescate.Alrededor de 200 voluntarios estuvieron horas y horas vaciando cubos de agua, arropándolas con toallas húmedas e intentando llevarlas al mar de nuevo; pero la marea era muy baja y los esfuerzos fracasaron. Finalmente, lograron refuerz...

Al menos 43 ballenas piloto, de las más de 200 que quedaron varadas el lunes y el martes en dos playas de Farewell Spit (una península en la isla del Sur, Nueva Zelanda), murieron ayer, a pesar de los esfuerzos de los equipos de rescate por mantenerlas vivas. Perecieron agotadas, aplastadas y deshidratadas, según contó Kay Stark, coordinador del equipo de rescate.Alrededor de 200 voluntarios estuvieron horas y horas vaciando cubos de agua, arropándolas con toallas húmedas e intentando llevarlas al mar de nuevo; pero la marea era muy baja y los esfuerzos fracasaron. Finalmente, lograron refuerzos y empezaron a llevar al agua a estos cetáceos de tres metros de largo, trasladándolos en camiones y manteniendo húmeda su piel.

La península de Farewell es famosa por este extraño fenómeno, que suele repetirse cada año por estas fechas. Los científicos todavía no han encontrado una explicación a la misteriosa fuerza que atrae a estos grandes cetáceos hacia su propia destrucción.