Metacrilato en el Jurásico

La entrada a Ferrol sigue dominada por la estatua ecuestre del generalísimo Franco, pero es tan grande que nadie la ve. Aquí nació, también, Pablo Iglesias, que aprendió a razonar con los pies descalzos y jugaba con barcos de papel en la super nintendo de la ría. El fundador del socialismo español no monta en nada, ni siquiera en un burro franciscano. Sólo tiene un discreto busto en la plaza de las Angustias.El candidato socialista Antolín Sánchez Presedo se declara orgulloso de la historia de su partido, de Iglesias a Felipe González. Todos esperan un milagro en estas elecciones, salvo...

La entrada a Ferrol sigue dominada por la estatua ecuestre del generalísimo Franco, pero es tan grande que nadie la ve. Aquí nació, también, Pablo Iglesias, que aprendió a razonar con los pies descalzos y jugaba con barcos de papel en la super nintendo de la ría. El fundador del socialismo español no monta en nada, ni siquiera en un burro franciscano. Sólo tiene un discreto busto en la plaza de las Angustias.El candidato socialista Antolín Sánchez Presedo se declara orgulloso de la historia de su partido, de Iglesias a Felipe González. Todos esperan un milagro en estas elecciones, salvo Fraga, que, como es católico, apostólico y romano, no cree en los milagros. Y no es poco milagro del PSOE gallego el conseguir que Felipe hable en estos tiempos de melancolía democrática.

El presidente vendrá a Galicia hacia el final de la campaña. Mientras tanto, van llegando los ministros. Narcís Serra dio un mitin muy razonable en Lugo, combatiendo el fraude de arriba y de abajo, por lo que es probable que perdiera algunos votos. Más ganancioso estuvo Borrell en Ferrol. Anunció "inversiones titánicas". Grandes aplausos. A todo el mundo le gusta que un ministro parezca un mago, y más si el cielo está plúmbeo y triste.

Hay una disputa en la campaña. Por ejemplo, ¿quién tiene el mérito de haber hecho las autovías de comunicación con la meseta, el Gobierno central o la Xunta? Los conservadores las han incluido en su balance, aunque la financiación sería estatal. El enigma es importante para el elector, sobre todo cuando comprueba que, por el momento, las dichosas autovías no existen más que en los anuncios televisivos. Como la realidad es televisión, y el coche del elector, una coliflor, la pregunta decisiva es: ¿quién ha hecho lo que no está hecho?

De lo que ya nadie habla en Galicia es del tren. Curros Enríquez llamó a la locomotora "el Cristo de los tiempos modernos" y casi le costó la excomunión del obispo de Orense. El tren gallego va camino de ser un recuerdo romántico por las colinas brumosas, como un fotograma de John Ford. Cuando el Expreso de Madrid llega en hora se producen grandes trastornos. Coge desprevenidos a los taxistas, el café está cerrado, etcétera. Hay protestas por el incumplimiento del retraso.

El teatro Jofre es de estilo modernista. El decorado preparado para el mitin es posmoderno, de metacrilato. La modernidad, más aún la posmodernidad, parecen ya algo antiguo. El futuro del mundo anda ahora por el periodo jurásico de la era mesozoica. Un síntoma autóctono: cada vez nacen menos niños en Galicia y el crecimiento vegetativo es el más bajo del planeta. A este paso habrá candidatos, pero no electores. No obstante, el presidenciable Presedo anuncia "nuevos tiempos" para sacar a la política gallega de la dinomanía. Presedo habla de grandes objetivos para una utopía realizable, una Galicia donde se respire libertad y bienestar.

Es joven Antolín, de 38 años, y está apostando su cabeza con valor, porque Tiranosaurus rex al acecho también los tiene en casa. Su gran desafío es vencer lo previsible. Escuchándole en Ferrol se ve que tiene más carácter del que se le reconoce y que elude el sectarismo, la demagogia y el disparate. No está mal para empezar.