Anasagasti pide a don Juan Carlos que no suspenda la visita al País Vasco

El portavoz del PNV en el Congreso de los Diputados, Iñaki Anasagasti, animó ayer al rey don Juan Carlos -en declaraciones a Servimedia- a aceptar la invitación empresarial para visitar el País Vasco los días 4 y 5 de octubre. La visita no está ni confirmada ni desmentida por la Casa Real, pero se ha especulado con la posibilidad de que no se realice debido al clima de crispación que se vive en el País Vasco tras la muerte de los presuntos etarras Miren Gurutza Yanci y Xabier Galparsoro.Para Anasagasti, "la situación no ha cambiado nada [desde las dos muertes]", y la amenaza de boicotear la vi...

El portavoz del PNV en el Congreso de los Diputados, Iñaki Anasagasti, animó ayer al rey don Juan Carlos -en declaraciones a Servimedia- a aceptar la invitación empresarial para visitar el País Vasco los días 4 y 5 de octubre. La visita no está ni confirmada ni desmentida por la Casa Real, pero se ha especulado con la posibilidad de que no se realice debido al clima de crispación que se vive en el País Vasco tras la muerte de los presuntos etarras Miren Gurutza Yanci y Xabier Galparsoro.Para Anasagasti, "la situación no ha cambiado nada [desde las dos muertes]", y la amenaza de boicotear la visita real hecha por el dirigente de HB Jon Idígoras "no tiene el menor sentido". "¿A cuenta de qué vienen esas declaraciones cuando él [Idígoras] estuvo en La Zarzuela y se puso corbata?".

Desde La Zarzuela se informó ayer que la Casa Real no ha tomado aún una decisión sobre la invitación que la fundación Cotec ha hecho al Rey para inaugurar en Bilbao un encuentro empresarial dedicado a innovación y competitividad. Según las mismas fuentes, en principio el viaje entraba en los planes previos que suelen hacerse sobre las visitas del Rey, pero en ningún momento se hizo el anuncio oficial.

"Desde mi punto de vista", añadió Anasagasti, "una visita del Rey es un gesto de normalidad y bien recibido en un momento en que los vascos queremos proyectar la imagen de una sociedad tranquila, estable y que, sobre todo, acoge con cortesía a todos sus visitantes". "Lo contrario", advirtió, "sería dar pábulo a que en Euskadi las cosas están enrarecidas, cuando no es cierto".