Michel Camdessus se perfila como el primer director del banco central europeo, tras dejar el Fondo Monetario

Francia y Alemania han pactado atribuir a una ciudad alemana, probablemente Francfort, la sede del Instituto Monetario Europeo (IME), el embrión del futuro banco central de la CE, a cambio de que su máximo responsable sea, durante una primera etapa, un francés.Michel Camdessus, actual director ejecutivo del Fondo Monetario Internacional (FMI), se perfila corno el primer director del Instituto Monetario Europeo cuando se ponga en funcionamiento, a principios de 1994, según indican fuentes de un gran banco central europeo. El persistente veto británico, que el primer ministro John Major ya ejerc...

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Francia y Alemania han pactado atribuir a una ciudad alemana, probablemente Francfort, la sede del Instituto Monetario Europeo (IME), el embrión del futuro banco central de la CE, a cambio de que su máximo responsable sea, durante una primera etapa, un francés.Michel Camdessus, actual director ejecutivo del Fondo Monetario Internacional (FMI), se perfila corno el primer director del Instituto Monetario Europeo cuando se ponga en funcionamiento, a principios de 1994, según indican fuentes de un gran banco central europeo. El persistente veto británico, que el primer ministro John Major ya ejerció en la cumbre de Lisboa de junio de 1992 -11 países estaban entonces dispuestos a complacer al Gobierno de Bonn- impedirá que el próximo Consejo Europeo de Copenhague, el 21 y 22 de junio, otorgue a Alemania la sede del IME.

La decisión definitiva sobre el reparto de nuevas sedes comunitarias será probablemente tomada en una cumbre europea extraordinaria que se celebrará en Bélgica en otoño, según indican fuentes diplomáticas.

Entonces el proceso de ratificación del Tratado de Maastricht en el Reino Unido debería estar concluido, y John Major podrá levantar su veto a cambio de alguna compensación.

Major podría ser indemnizado con la atribución a Londres de la Agencia Europea de Medicamentos, que también aspira a acoger Barcelona. España pugna además por llevarse las sedes de otras dos futuras instituciones: la Oficina de Marcas y, sobre todo, la Agencia de Medio Ambiente. Para atraer a esta última institución su principal rival es Copenhague.

La posible salida anticipada de Camdessus del Consejo Ejecutivo del FMI -su mandato sólo concluye en 1997- permite al ministro de Economía español, Carlos Solchaga, aspirar a ocupar al cargo a partir de 1994.

El puesto de director ejecutivo del FMI está tradicionalmente reservado a un europeo, que es el candidato propuesto por la Comunidad Europea. Solchaga está muy interesado, según fuentes diplomáticas, aunque también ha acariciado la idea de ser el primer director del IME si el pacto franco-alemán se resquebrajase.

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