Boyer cree que el mercado de trabajo es "nuestro mayor fracaso colectivo"

Tras la intervención de Becker, el ex ministro socialista de Economía y Hacienda Miguel Boyer tomó la palabra, se mostró de acuerdo con las tesis del Nobel de Economía respecto al mercado de trabajo y utilizó las expresiones "insensibilidad total" y "egoísmo de los que tienen empleo frente a los demás" para ilustrar que en España los salarios sigan creciendo a un ritmo del 6,5% anual mientras el paro se dispara brutalmente.Boyer afirmó que el mercado de trabajo "es nuestro mayor fracaso colectivo". Ninguno de los problemas actuales en España -"ni el déficit que se autoalimenta, ni la escasez d...

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Tras la intervención de Becker, el ex ministro socialista de Economía y Hacienda Miguel Boyer tomó la palabra, se mostró de acuerdo con las tesis del Nobel de Economía respecto al mercado de trabajo y utilizó las expresiones "insensibilidad total" y "egoísmo de los que tienen empleo frente a los demás" para ilustrar que en España los salarios sigan creciendo a un ritmo del 6,5% anual mientras el paro se dispara brutalmente.Boyer afirmó que el mercado de trabajo "es nuestro mayor fracaso colectivo". Ninguno de los problemas actuales en España -"ni el déficit que se autoalimenta, ni la escasez de ahorro, ni la falta de concurrencia en el sector servicios"- se le puede comparar, en su opinión.

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A continuación pasó la pelota a las centrales sindicales. "La llave la tienen los sindicatos", dijo. Los salarios en España son insensibles a la coyuntura, en su opinión: "No hay correlación alguna entre subida salarial y beneficios empresariales".

España, que podría situarse a la cabeza de los países de su entorno por sus características, "está abocada al fracaso" si no se emprende una reforma decidida del mercado laboral, en su opinión, que conduzca a un mayor grado de flexibilización. Boyer admitió al comienzo de su intervención no haber imaginado que "una crisis bastante clásica como ésta iba a ser de la gravedad que es", y reconoció la desorientación de los agentes sociales y políticos ante lo que calificó varias veces de "depresión": "Estamos frustrados y desarmados para acortarla".

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