El fiscal pide seis años de cárcel para 12 'camellos' del vídeo de Las Fronteras

El fiscal ha pedido seis años de prisión para cada uno de los 12 detenidos por tráfico de drogas en el barrio de Las Fronteras (Torrejón de Ardoz) tras la grabación por la policía de 50 horas de vídeo. En el juicio, que comienza el próximo día 26, han sido admitidas como prueba las cintas que muestran las transacciones de los camellos.

En su escrito de conclusiones dirigido a la Sección Cuarta de la Audiencia Provincial, el fiscal solicita una pena de seis años de prisión menor y multa de 10 millones de pesetas por un delito de tráfico de drogas para María Jesús Muñoz Suárez, Lucas More...

El fiscal ha pedido seis años de prisión para cada uno de los 12 detenidos por tráfico de drogas en el barrio de Las Fronteras (Torrejón de Ardoz) tras la grabación por la policía de 50 horas de vídeo. En el juicio, que comienza el próximo día 26, han sido admitidas como prueba las cintas que muestran las transacciones de los camellos.

En su escrito de conclusiones dirigido a la Sección Cuarta de la Audiencia Provincial, el fiscal solicita una pena de seis años de prisión menor y multa de 10 millones de pesetas por un delito de tráfico de drogas para María Jesús Muñoz Suárez, Lucas Moreno Muñoz, Flaviano Moreno Salazar, Paula Muñoz Suárez, Antonio Moreno Navarro, Manuel Fernández Moreno, Rocío Muñoz Suárez, Luis Muñoz Suárez, Antonio Fernández Muñoz, Santiago Moreno Salazar y Manuel Moreno Salazar, alias Maneli. Esta petición se eleva a ocho años de cárcel en el caso de Carmen Navarro Suárez, como reincidente en este tipo de delitos.El Ministerio Público considera que los encausados formaban -con diversos lazos de parentesco- el clan del Maneli: cinco familias dedicadas a la venta de heroína y cocaína a drogodependientes. En la redada policial practicada hace un año en Las Fronteras fueron detenidas 19 personas, entre ellas un menor que actuaba como correo para trasladar la droga.

El fiscal solicita que declaren en el juicio 17 testigos, entre ellos los policías encargados de la investigación y los peritos que examinaron las cintas de vídeo. Los agentes, disfrazados con pelucas y ocultos en vehículos camuflados, registraron con sus cámaras unas 200 transacciones de los camellos. Tras cada grabación, se cacheaba a los compradores. Los portadores reconocían que acababan de comprar las papelinas en Las Fronteras, pero no identificaron a los vendedores. La policía también practicó registros en los domicilios de los detenidos, donde fueron decomisados pequeños alijos de droga y dinero y joyas.

En Las Fronteras se sucedieron desde 1989 los enfrentamientos entre camellos y vecinos, quienes llegaron a organizar patrullas de vigilancia callejera para luchar contra el tráfico de drogas en su barrio.