El episcopado recupera la 'Humanae vitae' y sostiene que los únicos métodos anticonceptivos son los naturales y la castidad

Juan Pablo II dijo que no se podía mirar ni a la propia esposa con concupiscencia. Y los obispos españoles, que han elaborado un documento con motivo del 25 aniversario de la encíclica Humanae Vitae, afirman que las únicas medidas contraceptivas son la castidad y los métodos naturales. Estos últimos, de acuerdo con un congreso científico organizado recientemente por el Vaticano, son fiables en el 99% de los casos.El documento del episcopado español fue elaborado por la Comisión Episcopal para la Doctrina de la Fe, que preside Antonio Palenzuela, obispo de Segovia, y refrendado por la as...

Juan Pablo II dijo que no se podía mirar ni a la propia esposa con concupiscencia. Y los obispos españoles, que han elaborado un documento con motivo del 25 aniversario de la encíclica Humanae Vitae, afirman que las únicas medidas contraceptivas son la castidad y los métodos naturales. Estos últimos, de acuerdo con un congreso científico organizado recientemente por el Vaticano, son fiables en el 99% de los casos.El documento del episcopado español fue elaborado por la Comisión Episcopal para la Doctrina de la Fe, que preside Antonio Palenzuela, obispo de Segovia, y refrendado por la asamblea plenaria en su sesión del pasado mes de noviembre. El documento, que no fue publicado en su momento por la Oficina de Información de la Conferencia Episcopal, fue divulgado ayer. En el texto se señala que, "para sanear los actuales desórdenes sexuales, hay que curar de raíz el enrarecimiento religioso de nuestro pueblo".

El texto episcopal pretende zanjar lecturas permisivas sobre la Humanae Vitae, una encíclica de Pablo VI que levantó expectación ante la posibilidad de que la doctrina sobre moral sexual de la Iglesia católica aceptara la utilización de la píldora como medida contraceptiva. No fue así. Los obispos españoles recuperan ahora esta encíclica para señalar que la paternidad responsable ha de cimentarse sobre dos cuestiones la castidad y los métodos naturales. El cuerpo, a juicio de los prelados, no puede ser declarado "zona de libre cambio sexual".

El texto, titulado Una encíclica profética: la Humanae Vitae. Reflexiones doctrinales y pastorales, está dirigido a teólogos y sacerdotes, y pide uniformidad doctrinal y valentía a la hora de explicar esta doctrina. El documento considera significativo que los fieles silencien cuando se confiesan cuanto se refiere a la moral sexual y vida matrimonial.