Protesta ante la Asamblea por la reducción de camas para niños

Unos 50 trabajadores del Gregorío Marañón se concentraron ayer ante la Asamblea regional para denunciar la pérdida de camas pediátricas, que podría acarrear el traslado de la Cámara al solar que ocupa hoy la maternidad de este hospital.Los manifestantes portaban, pancartas contrarias al traslado y corearon consignas contra el Gobierno regional y contra el consejero de Salud, Pedro Sabando. La protesta se desarrolló mientras Sabando explicaba a los grupos de la oposición su proyecto: un nuevo hospital infantil, con casi 100 camas menos que el actual, en el viejo edificio que ocupa la maternidad...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Unos 50 trabajadores del Gregorío Marañón se concentraron ayer ante la Asamblea regional para denunciar la pérdida de camas pediátricas, que podría acarrear el traslado de la Cámara al solar que ocupa hoy la maternidad de este hospital.Los manifestantes portaban, pancartas contrarias al traslado y corearon consignas contra el Gobierno regional y contra el consejero de Salud, Pedro Sabando. La protesta se desarrolló mientras Sabando explicaba a los grupos de la oposición su proyecto: un nuevo hospital infantil, con casi 100 camas menos que el actual, en el viejo edificio que ocupa la maternidad, que sería derribado y se trasladaría a un inmueble de nueva creación en el Marañón. Los manifestantes indicaron que, además de la reducción de plazas, el proyecto, de ejecutarse, implicará una pérdida momentánea de puestos de trabajo, que afectará a los sanitarios de estas áreas.

La reducción de camas pediátricas en el Gregorio Marañón -de las 157 que hay en la actualidad, pasaría a tener 60- supondría, además, la desaparición de la docencia pregrado y posgrado de esa especialidad en el Marañón, -afirma Jacinto Colmenero, portavoz de la Federación de Sindicatos Médicos (FESIME) en este hospital. Según Colmenero, el área sanitaria del Marañón sólo dispone hoy de una cama por cada 1.000 habitantes. Una menos de las que recomienda la Organización Mundial de la Salud. Colmenero asegura que en los últimos años el Marañón -uno de los hospitales más grandes de Europa- ha perdido paulatinamente camas para niños en favor de otros centros del Insalud.

El consejero Sabando recordó ayer a los manifestantes: "Parece que no entienden el castellano; he dicho que esto hay que negociarlo con los comités de empresa, médicos y con los grupos políticos; todavía no se ha tomado una decisión".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En