Tribuna:

Tendencia negativa

La lógica chartista se está imponiendo en el mercado de valores ante la dificultad del análisis fundamental para explicar los últimos movimientos. Los máximos relativos alcanzados los días 19 y 27 de noviembre se han convertido en un problema, tanto porque significan la formación de una figura de doble máximo, como porque suponen el fracaso del intento de superación del 218%, la resistencia que marca en este momento la diferencia entre un mercado alcista o bajista, ayer se rompió el soporte del 210% y lo que queda hasta llegar al 198% tiene poca consistencia, a menos que las instituciones deci...

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La lógica chartista se está imponiendo en el mercado de valores ante la dificultad del análisis fundamental para explicar los últimos movimientos. Los máximos relativos alcanzados los días 19 y 27 de noviembre se han convertido en un problema, tanto porque significan la formación de una figura de doble máximo, como porque suponen el fracaso del intento de superación del 218%, la resistencia que marca en este momento la diferencia entre un mercado alcista o bajista, ayer se rompió el soporte del 210% y lo que queda hasta llegar al 198% tiene poca consistencia, a menos que las instituciones decidan lo contrario. En esta sesión, la mitad del volumen negociado se cruzó a partir de las dos de la tarde y fue para absorber papel, ya que el índice llegó a caer en ese tiempo hasta 3,49 puntos.Las expectativas del mercado se centran exclusivamente en la esperada reacción del cierre del ejercicio y, en un plazo más corto, en el momento idóneo para tomar posiciones y aprovechar esa coyuntura.

A plazos más largos, sólo existen comentarios sobre ese 0,2% de crecimiento económico vaticinado para el primer semestre del año próximo por la máxima autoridad monetaria. El índice terminó perdiendo un 1,26%, 2,68 puntos, mientras que el Ibex 35 cayó un 1,54%.

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