La guerrilla en El Salvador prosigue su desmovilización de manera escalonada
El Frente Farabundo Martí de Liberación Nacional (FMLN), el movimiento de guerrilla salvadoreño, concluyó ayer la desmovilización de un nuevo contingente de 500 combatientes y anunció que emprenderá a partir de hoy "de manera escalonada" la cuarte fase del proceso de abandono de las armas por parte de sus fuerzas, que suman más de 9.000 guerrilleros. Esta nueva fase afectará a 1.343 combatientes.
El portavoz oficial de la misión de observadores de la ONU (Onusal), Mario Zamorano, afirmó ayer que la operación se estaba desarrollando "con toda normalidad", pero aseguró que no existía ...
Regístrate gratis para seguir leyendo
Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
El Frente Farabundo Martí de Liberación Nacional (FMLN), el movimiento de guerrilla salvadoreño, concluyó ayer la desmovilización de un nuevo contingente de 500 combatientes y anunció que emprenderá a partir de hoy "de manera escalonada" la cuarte fase del proceso de abandono de las armas por parte de sus fuerzas, que suman más de 9.000 guerrilleros. Esta nueva fase afectará a 1.343 combatientes.
El portavoz oficial de la misión de observadores de la ONU (Onusal), Mario Zamorano, afirmó ayer que la operación se estaba desarrollando "con toda normalidad", pero aseguró que no existía ningún balance exacto del número de personas que ya dejaron las armas.
Mientras prosigue el proceso de desmovilización ha surgido una nueva polémica entre el Gobierno y la guerrilla, que ha criticado el anuncio del presidente Alfredo Cristiani de que va a ordenar el despliegue del Ejército en varías zonas agrícolas para, oficialmente, impedir actos de delincuencia durante la recolección del café. El FMLN considera que, al involucrar a los militares en tareas de seguridad pública, el Ejecutivo viola a la vez la Constitución y los acuerdos de paz.