Centenares de musulmanes muertos en la toma de Bosanski Brod, que consolida la 'Gran SerbIa'

Las fuerzas serbias que han tomado la ciudad bosnia de Bosanski Brod después de varios meses de asedio consolidaban ayer sus posiciones que suponen un paso decisivo para la construcción de la Gran Serbia. Los conquistadores dieron sólo unas horas a los habitantes musulmanes de la ciudad para que huyeran despavoridos hacia la localidad gemela croata de Slavonski Brod. Luego volaron el puente de Sanski Most sobre el río Sava, el último que unía Croacia y Bosnia.

La toma de Bosanski Brod es, a juicio de los expertos occidentales, el mayor éxito militar de las fuerzas serbias en los últimos...

Las fuerzas serbias que han tomado la ciudad bosnia de Bosanski Brod después de varios meses de asedio consolidaban ayer sus posiciones que suponen un paso decisivo para la construcción de la Gran Serbia. Los conquistadores dieron sólo unas horas a los habitantes musulmanes de la ciudad para que huyeran despavoridos hacia la localidad gemela croata de Slavonski Brod. Luego volaron el puente de Sanski Most sobre el río Sava, el último que unía Croacia y Bosnia.

La toma de Bosanski Brod es, a juicio de los expertos occidentales, el mayor éxito militar de las fuerzas serbias en los últimos tres meses. Con la excepción de algunos islotes de resistencia, como los de Sarajevo y Gorazde, las conquistas territoriales de lo que históricamente se conoce como Gran Serbia -formada por aquellos territorios de la antigua Yugoslavia habitados mayoritariamente por serbios o reivindicados por Belgrado por razones históricas, como es el caso de la provincia de Kosovo-, han sido completadas con éxito.La presión militar se ha trasladado en las últimas horas a Korace, a 10 kilómetros al suroeste de Bosanski Brod, donde se han refugiado parte de las tropas croatas y musulamanas. Ayer aún era posible escuchar algunas explosiones y disparos aislados en la ciudad recién conquistada, pero no se ha producido contraofensiva alguna sobre Bosanski Brod.

En Sarajevo, donde las noticias de la caída de la ciudad cayeron como un jarro de agua fría, se avivaron los combates. Varios proyectiles de artillería de 155 milímetros cayeron cerca de la sede de la presidencia de Bosnia-Herzegovina. Un edificio próximo al cuartel Mariscal Tito, que fue sede principal de los cascos azules, ardía sin control. Los combates más duros tenÍan lugar en Hrasno, un barrio al sur de la capital.

Los pocos datos concretos conocidos de la situación en Bosanski Brod son dramáticos. Varios civiles dijeron entre sollozos que se abatió sobre la ciudad una tormenta de fuego. "Un terremoto", fue la descripción de un musulmán entrevistado por la radio croata. Según relatos- de testigos, muchos civiles tuvieron que cruzar el río en barcazas o a nado después de que los serbios volaran el puente, el último que unía Croacia con Bosnia.

No se conocen cifras precisas de bajas durante la batalla de Bosanski Brod. Fuentes de la propia policía de la ciudad estiman en 2501os muertos durante los ataques artilleros y de aviación previos a la ofensiva terrestre. Muchos de los edificios que se encuentran en ruinas esconden cuerpos sin vida de civiles. Fuentes serbias hablan de centenares de soldados musulmanes y croatas muertos durante la torna de la ciudad. La televisión croata, en cambio, no ha dado cifras.

'Limpieza étnica' sin esfuerzo

Informes extraoficiales aseguran que todavía hay más de 20.000 personas atrapadas, desesperadas por abandonar la ciudad. Su salida no parece - complicada ante el interés serbio por limpiar étnicamente la zona. Lo mejor que les puede ocurrir a los nuevos amos de Bosanski Brod es un éxodo de bosnios musulmanes.

Las autoridades y la prensa oficial croatas trataban de minimizar la magnitud de la aplastante victoria militar de los serbios. Un comunicado de las fuerzas armadas difundido al mediodía calificó la caída de la ciudad de "victoria pírrica" y con dudosa precisión ennumeró el precio que, según Zagreb, tuvieron que pagar los serbios. Según el comunicado, perdieron entre seis y ocho mil hombres, 21 aviones de combate, 160 tanques y 300 piezas de artillería. Eran datos imposibles de verificar, pero claramente pretendían demostrar la capacidad de respuesta de los croatas. Las imágenes de televisión no invitaban a sacar conclusiones tan heroícas.

La intensificación de la campana serbia en los últimos días refleja también el afán del líder Radovan Karadzic de ganar la mayor cantidad de terreno posible antes de la llegada del invierno, que forzará la disminución de operaciones terrestres.