Arrestado en Roma el jefe de reparto europeo de 'coca'

PERU EGURBIDE, La operación Green Ice, conducida simultáneamente en EE UU, Italia, España, Reino Unido, Canadá y Costa Rica, con un resultado inicial de más de 200 detenidos, ha supuesto un golpe que ha cortado los canales de distribución de droga y lavado de dinero de los carteles colombianos en Europa, según afirmó ayer el ministro italiano de Interior, Nicola Mancino.

En concreto, las 34 detenciones realizadas en Italia afectan, según la misma fuente, a importantes conexiones de los carteles de Cali y de Pereira con la Mafia siciliana, la Camorra napolitana y la N'Dranghet...

PERU EGURBIDE, La operación Green Ice, conducida simultáneamente en EE UU, Italia, España, Reino Unido, Canadá y Costa Rica, con un resultado inicial de más de 200 detenidos, ha supuesto un golpe que ha cortado los canales de distribución de droga y lavado de dinero de los carteles colombianos en Europa, según afirmó ayer el ministro italiano de Interior, Nicola Mancino.

En concreto, las 34 detenciones realizadas en Italia afectan, según la misma fuente, a importantes conexiones de los carteles de Cali y de Pereira con la Mafia siciliana, la Camorra napolitana y la N'Dranghetta calabresa. También se han detectado intereses del cártel de Medellín en estas redes, según los investigadores, pero éstos son de menor entidad.

El circuito, investigado simultáneamente por la Drug Enforcement Agency (DEA) norteamericana y la Criminalpol italiana durante los últimos 10 meses, según Mancino, servía para enviar cocaína y heroína a Europa, y lograr luego el retorno a Colombia del importe de la droga ya lavado.

Las autoridades italianas destacaron ayer que España sería el punto clave de primera entrada de la droga en el continente, mientras que Italia tendría el papel más relevante en su distribución y en el blanqueo del dinero. Durante la investigación del caso, en Italia se requisaron más de 300 kilos de droga y más de 3.000 millones de pesetas. El jefe de la policía, italiana, Vincenzo Parisi, señaló ayer que el dinero requisado en Inglaterra llenaba una cámara de más de 20 metros cúbicos.

Como personaje clave de toda esta organización fue presentado un colombiano de 35 años con el nombre de José Dúrán (las autoridades dudan de su verdadera identidad), detenido en un célebre salón de té de la plaza de España, en Roma, el pasado 25 de septiembre. Durán -que tomaba un té de negocios con Pedro Felipe Villaquirán, su representante en Roma, también colombiano, y con una blanqueadora holandesa llama da Bettein Martens- es, según la policía italiana, el jefe del violento cartel de Pereira y el distribuidor número uno de droga de todos los carteles en Europa.

Espía y 'narco'

Hacia las mismas fechas, la DEA logró detener en Los Angeles a otro colombiano identificado como Gonzales Camargo Polnoa. Según la información oficial italiana, se trata de un alto cargo del departamento de Comercio Exterior del banco central de Colombia, que, además, ocupaba una posición relevante en los servicios secretos de su país, desde la cual garantizaba las operaciones del grupo desarticulado. Camargo fue detenido en la capital californiana precisamente cuando asistía a una reunión internacional para la lucha contra el narcotráfico.

Otra parte de la red eran los abogados colombianos Carlos Urquijo y Luis Mola, detenidos en Costa Rica tras caer en una trampa de agentes de la DEA.

La mayoría de los italianos detenidos en Roma, Nápoles, Palermo, Milán, Brescia, Mantua y Reggio Calabria eran pequeños empresarios que la policía italiana vincula a las siguientes organizaciones criminales: el clan de los corleoneses y la familia Cuntrera, äruana, por lo que se refiere a la Mafia; el clan camorrista de Carmine Alfieri y el clan Piromalli de la N'Dranghetta calabresa. También fue detenida una empleada de la Banca Nazionale del Lavoro y una octogenaria de Mantua titular de una cuenta por la que en 12 meses habían pasado unos 40 millones de dólares.

El ministro Mancino dijo que la operación Green Ice aún no ha concluido y que podría suscitar reacciones mafiosas violentas. En la rueda de prensa de ayer en Roma, llegó la noticia de que un policía colombiano que participó en la investigación acababa de ser asesinado.