Vivir en la 'Freedom'

La NASA expone una réplica de la estación espacial para atraerse el apoyo popular

Con una cantidad innumerable de luces, botones y pantallas digitales, el artilugio parece haber salido de una película de ficción científica. Y es que este extraño habitáculo no es otra cosa que una réplica exacta a escala natural de dos módulos de la estación espacial Freedom expuestos al público estadounidense este verano. Se trata de un esfuerzo de relaciones públicas de la NASA para obtener el apoyo popular a este proyecto, tan ambicioso como polémico.

La agencia espacial norteamericana ha decidido crear esta réplica con la intención de vencer las reticencias del Congreso y el Senad...

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Con una cantidad innumerable de luces, botones y pantallas digitales, el artilugio parece haber salido de una película de ficción científica. Y es que este extraño habitáculo no es otra cosa que una réplica exacta a escala natural de dos módulos de la estación espacial Freedom expuestos al público estadounidense este verano. Se trata de un esfuerzo de relaciones públicas de la NASA para obtener el apoyo popular a este proyecto, tan ambicioso como polémico.

La agencia espacial norteamericana ha decidido crear esta réplica con la intención de vencer las reticencias del Congreso y el Senado para llevar a cabo la nave espacial Freedom (Libertad), considerada pieza clave para las investigaciones en la Luna y en Marte. El proyecto, en el que participan Europa, Japón y Canadá, ha costado ya 5.600 millones de dólares y su puesta en órbita puede alcanzar los 100.000 millones de dólares, según los últimos cálculos. Conseguir este dinero es un reto importante en un momento en que la NASA atraviesa una de sus principales crisis por recortes presupuestarios y EE UU vive una preocupante recesión económica.Con 8,4 metros de largo por 4,4 de diámetro cada uno, el diseño modular de la NASA es más pequeño que los propuestos por la agencia espacial europea y la japonesa. El camarote de la tripulación es un híbrido entre un coche de tren y una cocina ultramoderna, donde las comodidades, según los cánones terrestres, brillan por su ausencia.

Las camas consisten en unos sacos de dormir adosados a lo que bajo los efectos de la gravedad podría llamarse pared; en ellas, los astronautas se abandonan a un sueño ligerísimo. La cocina consta de microondas y de una máquina dispensadora, en donde apretando un botón uno selecciona el plato deseado de un menú limitado, que incluye fruta fresca y verduras. El cuarto de baño no es mayor que el tamaño de una bañera común. La ducha funciona a presión, y debido a la falta de gravedad los astronautas tienen que secarse y secar la ducha con una aspiradora.

Sacar agua del aire

Dos avances tecnológicos nuevos hacen posible la vida dentro de la estación Freedom. El primero es el reciclaje y purificación del aire, ya usado en submarinos, pero con la diferencia de que los sumergibles pueden subir a la superficie a renovar el aire y la estación se encuentra en el vacío.El segundo avance es más novedoso, y se trata del reciclaje y purificación del agua. Por ejemplo, el agua usada en la ducha, la cocina, e incluso la orina, serán purificadas y utilizadas de nuevo. La humedad del aire será filtrada para emplearla como agua para beber.

Finalmente, el módulo del laboratorio es casi idéntico al camarote de la tripulación, a excepción de que el uso dado a los aparatos es de carácter científico y no cotidiano. El experimento más novedoso es el de la microgravedad. Se trata de un tambor centrífugo, en donde una selección de plantas y animales se ve sujeta a la rotación del aparato, acción que crea distintas fuerzas de gravedad dependiendo de su velocidad, normalmente no mucho mayor que la del segundero en un reloj. Este tipo de investigación proporcionará datos que facilitarán las investigaciones en la Luna, y un posible viaje al mítico planeta Marte.

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