Escuelas

Resido en la población de Vilassar de Mar, villa -semidormitorio- de 11.000 habitantes aproximadamente, que en verano casi triplica su población. El pasado fin de semana, unos amigos franceses vinieron a visitarnos. Personas de clase media, habitan en el norte de Francia, y, con los parámetros de antes, pueden ser calificados de intelectuales.Conocedores bastante en profundidad de España y más aún de Cataluña, no habían estado nunca en Vilassar de Mar, por lo que estuvimos recorriéndola con cierto detenimiento. Cuando transcurrieron los dos días de la visita, nos hicieron -a mi esposa y a mí- ...

Resido en la población de Vilassar de Mar, villa -semidormitorio- de 11.000 habitantes aproximadamente, que en verano casi triplica su población. El pasado fin de semana, unos amigos franceses vinieron a visitarnos. Personas de clase media, habitan en el norte de Francia, y, con los parámetros de antes, pueden ser calificados de intelectuales.Conocedores bastante en profundidad de España y más aún de Cataluña, no habían estado nunca en Vilassar de Mar, por lo que estuvimos recorriéndola con cierto detenimiento. Cuando transcurrieron los dos días de la visita, nos hicieron -a mi esposa y a mí- un comentario que nos dejó doblemente helados: por lo que significaba, y porque nunca nos habíamos dado cuenta de ello.

Con tono de extrañeza, crítica, pero también con discreción, nos dijeron: "Es curioso, este pueblo dispone de un polideportivo cubierto en la mayoría de su superficie y bien equipado: tiene un campo de deportes nuevo que está muy acondicionado; pero de las cuatro escuelas públicas con que cuenta, dos están ubicadas en barracones".

Y es cierto, una lo está desde hace más de ocho años, la otra desde hace cinco. Sin embargo, el polideportivo fue construido no hace más de cuatro años, y el campo de deportes aún no hace dos que fue inaugurado. A mí mismo me pregunto: ¿en qué país vivimos?-