Vecinos satisfechos con el veredicto

"Cuando compré el piso, la casa era de ocho alturas, y a la entrega de llaves tenía nueve [sin contar la baja] y los trasteros reducidos. También nos vendieron la casa con parque, y resulta que hicieron garajes y nos obligaron a comprar plaza para el coche", afirma un vecino que reside en uno de los edificios levantados por el constructor Antonio Méndez Pozo con licencias declaradas ahora ¡legales por la Audiencia de Burgos."Los pisos costaron unos cinco millones, el precio admitido, porque son viviendas de protección oficial, pero si no comprábamos la plaza de garaje, que costaba un millón, n...

"Cuando compré el piso, la casa era de ocho alturas, y a la entrega de llaves tenía nueve [sin contar la baja] y los trasteros reducidos. También nos vendieron la casa con parque, y resulta que hicieron garajes y nos obligaron a comprar plaza para el coche", afirma un vecino que reside en uno de los edificios levantados por el constructor Antonio Méndez Pozo con licencias declaradas ahora ¡legales por la Audiencia de Burgos."Los pisos costaron unos cinco millones, el precio admitido, porque son viviendas de protección oficial, pero si no comprábamos la plaza de garaje, que costaba un millón, no nos los vendían. Al principio querían escriturar las plazas por 500.000 pesetas, pero ,como ya había empezado el lío en los tribunales, acabaron figurando con su precio", afirma este vecino.

Irregularidades

El hombre asegura que la sentencia condenatoria ha provocado satisfacción en el bloque, construido en 1985 y situado entre las calles Vitoria, Bartolomé Ordóñez y Farmacéutico Obdulio Fernández. La construcción de este solar ha estado rodeada de irregularidades, valoradas en un mínimo de 759 millones de pesetas por el Colegio de Arquitectos, organismo que actuó como perito en el juicio. Este es uno de los casos estudiados por el tribunal que ha condenado a 12 años de inhabilitación al alcalde.

Las irregularidades comenzaron pronto. En la aprobación inicial de¡ plan urbanístico, este terreno de Méndez Pozo formaba parte de la parcela G-2, un espacio con unidad de actuación. Sin embargo, en la aprobación definitiva del plan, este solar quedó excluido y se convirtió en la parcela G-2 bis. El aprovechamiento de este terreno segregado se duplicó: pasó de un metro de construcción por cada uno de solar a 1,9. Además, el edificio invadió el camino público de Las Calzadas y un espacio que debía ser dedicado a parque y guardería.