"Una colombiana para mí y otra para mi amigo"

Un alcalde salmantino convirtió un acto del V Centenario en una 'caravana de mujeres'

Un grupo de vecinos, solteros y viudos en su mayoría, de la localidad salmantina de Los Santos, quiere presentar una denuncia contra Francisco Mesonero, alcalde socialista de Rágama, "por el fraude y el engaño que supuso la fiesta del pasado día 8 de febrero". Rágama es un pueblo situado a 60 kilómetros de la capital salmantina, y su alcalde organizo el pasado Fin de semana una caravana de mujeres que fue más una película surrealista que un encuentro para buscar pareja.

La caravana de mujeres fue, según los vecinos, "un auténtico fracaso", y, según el alcalde, se organizó para ac...

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Un grupo de vecinos, solteros y viudos en su mayoría, de la localidad salmantina de Los Santos, quiere presentar una denuncia contra Francisco Mesonero, alcalde socialista de Rágama, "por el fraude y el engaño que supuso la fiesta del pasado día 8 de febrero". Rágama es un pueblo situado a 60 kilómetros de la capital salmantina, y su alcalde organizo el pasado Fin de semana una caravana de mujeres que fue más una película surrealista que un encuentro para buscar pareja.

La caravana de mujeres fue, según los vecinos, "un auténtico fracaso", y, según el alcalde, se organizó para acabar con la soltería que aqueja a Rágama. Hasta el pueblo sólo llegó una mujer que declaró públicamente su intención de casarse, si bien era de un pueblo cercano, soltera y con 13 hijos.Las únicas forasteras que allí se vieron fueron un grupo de jóvenes, entre las que se encontraban las hijas del embajador de Perú en España, que asistían, según señalaron, "a un acto cultural en torno al V Centenario que había organizado el Ayuntamiento". Una invitación del alcalde que se había hecho extensiva a todo el alumnado del Colegio Mayor Hispanoamericano Nuestra Señora de Guadalupe de Madrid.

El desbarajuste llegó a tal punto que los más de 2.000 solteros que asistían a la fiesta de la caravana de mujeres tomaron por candidatas a boda a las jóvenes peruanas, que por más que explicaban que su presencia era de carácter cultural eran objeto de calificativos cariñosos y piropos como "cordera, qué buena estás" o "con esos lunares que tienes, de aquí sales hoy casada", por ¡os mozos de Rágama.

Amor y V Centenario

La fiesta se inició a las 11 horas del sábado día 8 y se prolongó hasta la madrugada del domingo. Nada más comenzar, el alcalde, Francisco Mesonero, definió el acontecimiento como "la fiesta del amor del V Centenario"; una celebración que también buscaba recordar a un conquistador de Perú llamado Francisco de Carvajal, apodado El Demonio de los Andes, que nació en Rágama y murió en Perú.

El gobernador civil de Salamanca, que asistió junto con otras autoridades provinciales, felicitó al alcalde por "la brillante idea", y animó a los participantes a encontrar pareja para acabar con la "desaparición de las escuelas por la falta de materia prima que son los niños".

Las jóvenes peruanas, entre las que se encontraban las hijas del embajador de Perú, pidieron explicaciones al alcalde, pero fue finalmente el hijo del embajador, Rolando Toledo, el que tuvo que dar el mentís ante los numerosos periodistas de que "la Embajada peruana tenga algo que ver en la organización de esta caravana de mujeres ", y responsabilizó al alcalde del engaño. No obstante, el alcalde siguió intentando hacer creer a la concurrencia que hasta el pueblo habían llegado 35 mujeres" y que su objetivo estaba "cumplido". Incluso señaló que en su casa tiene "una gallega reservada para un amigo".

Francisco Mesonero sólo pudo enseñar un centenar de cartas con fotos y direcciones de mujeres, en su mayoría hispanoamericanas, que estaban dispuestas a casarse "a cambio de un billete de avión que las permitiera salir de su país de origen".

La fiesta pudo, según afirman algunos solteros de Los Santos, "acabar con desórdenes públicos, ya que el alcalde jugó con las ilusiones de todos los solteros que fueron a buscar a la mujer de su vida. Si no pasó nada, fue de inilagro".

El surrealismo de la fiesta en Rágama fue la constante de una jornada en la que algunos viudos o solteros exigían al alcalde "una colombiana para mí y otra para un amigo que no ha venido"; otros daban el nombre, dirección y teléfono a los periodistas de radio para que lo emitieran por las ondas, y algunos con mayores posibilidades económicas facilitaban el resultado de la cosecha de remolacha del año anterior, "por si acaso".

Lo que aún no se sabe es quién disfrutará del viaje a Canarias que el Ayuntamiento de Rágama ha prometido a la primera pareja que se una en matrimonio después de la fiesta.

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